Centenares de personas disfrutaron las danzas con más tradición en la ciudad y del especial concierto de Acopovi en Porta do Sol
nnn El centro de Vigo acogió una jornada más a miles de personas para disfrutar de la recta final de la Navidad, en la que no faltaron la música y la danza. Durante la tarde, los vecinos del Casco Vello continuaron con la celebración de los tradicionales Ranchos de Reis, bailes y danzas tradicionales –amenizadas con gaitas y percusión– con las que se amenizaban históricamente los primeros días del año en la ciudad. El jueves realizaron los pasacalles por el Casco Vello y ayer fue el turno de Príncipe y el entorno de Porta do Sol.
Y precisamente a pocos metros del Árbol Navideño más alto de España tuvo lugar con la caída de la noche el especial concierto navideño de las corales de Acopovi. Sus miembros –con gorro rojo– se situaron sobre la carretera, rodeados de centenares de personas que disfrutaron del espectáculo. El concierto de Acopovi demostró una vez más por qué Vigo es uno de los lugares de referencia por la calidad de estas agrupaciones. Entre los asistentes hubo muchas caras conocidas, como la Abel Caballero, que no quiso perderse este recital. n
Y precisamente a pocos metros del Árbol Navideño más alto de España tuvo lugar con la caída de la noche el especial concierto navideño de las corales de Acopovi. Sus miembros –con gorro rojo– se situaron sobre la carretera, rodeados de centenares de personas que disfrutaron del espectáculo. El concierto de Acopovi demostró una vez más por qué Vigo es uno de los lugares de referencia por la calidad de estas agrupaciones. Entre los asistentes hubo muchas caras conocidas, como la Abel Caballero, que no quiso perderse este recital. n