Francia, Reino Unido y Alemania estudian la posible imposición de "pasaportes" que la certifiquen
Los países de Europa han optado por la voluntariedad en la vacuna anticovid, aunque algunos de ellos, como Francia, Reino Unido o Austria están analizando posibles certificados o "pasaportes" que lo acrediten. Mientras, la Organización Mundial de la Salud (OMS) insiste en que el remedio contra la pandemia es acelerar la inmunización y los fármacos disponibles prometen una efectividad de en torno al 90%.
En Alemania la vacunación contra el coronavirus es voluntaria y el Gobierno insistió en que no hay planes para hacerla obligatoria. El ministro de Sanidad, Jens Spahn, dio su palabra ante el parlamento de que no se introduciría la imposición de inmunizarse y la Comisión Permanente para la Vacunación considera "extremadamente improbable" que se introduzca una medida en ese sentido y advierte de que hay muchos obstáculos jurídicos para ello.
Tampoco en Francia la vacunación es obligatoria. No obstante, el Gobierno lanzó una consulta en línea para conocer la opinión de los ciudadanos sobre la posibilidad de implantar un certificado de vacunación y si debería ser impostivo u opcional. Según la última encuesta publicada, un 61% de los franceses desea vacunarse, lo que supone 5 puntos más que en enero.
En el Reino Unido la inmunización es también voluntaria y tiene de momento una alta aceptación entre la población, si bien el Gobierno impulsó una campaña para persuadir de que se vacune a las personas reacias. El Ejecutivo estudia ahora la posible introducción de una aplicación para demostrar la inmunidad o un test negativo.
Por su parte, el plan de vacunación en Italia es por el momento voluntario y el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, señaló que no considera necesario imponerla de forma obligatoria.
En Alemania la vacunación contra el coronavirus es voluntaria y el Gobierno insistió en que no hay planes para hacerla obligatoria. El ministro de Sanidad, Jens Spahn, dio su palabra ante el parlamento de que no se introduciría la imposición de inmunizarse y la Comisión Permanente para la Vacunación considera "extremadamente improbable" que se introduzca una medida en ese sentido y advierte de que hay muchos obstáculos jurídicos para ello.
Tampoco en Francia la vacunación es obligatoria. No obstante, el Gobierno lanzó una consulta en línea para conocer la opinión de los ciudadanos sobre la posibilidad de implantar un certificado de vacunación y si debería ser impostivo u opcional. Según la última encuesta publicada, un 61% de los franceses desea vacunarse, lo que supone 5 puntos más que en enero.
En el Reino Unido la inmunización es también voluntaria y tiene de momento una alta aceptación entre la población, si bien el Gobierno impulsó una campaña para persuadir de que se vacune a las personas reacias. El Ejecutivo estudia ahora la posible introducción de una aplicación para demostrar la inmunidad o un test negativo.
Por su parte, el plan de vacunación en Italia es por el momento voluntario y el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, señaló que no considera necesario imponerla de forma obligatoria.
