Los drones se convirtieron en los grandes protagonistas en la guerra que inició Putin con el objetivo de invadir Ucrania. En las últimas semanas, hubo múltiples ataques con estos dispositivos que causaron numerosas muertes y daños en varias regiones ucranianas. Es tanto el peligro que suponen, que hasta la OTAN aseguró que representan una gran amenaza para la sociedad en general.
Rusia lanzó la noche del domingo contra la región de Odesa, en el sur de Ucrania, 19 drones kamikaze Shahed y un total de 14 misiles, dos de ellos supersónicos, informó ayer el comando operativo Sur de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que anunció que el ataque destruyó graneros e infraestructura portuaria. Las defensas antiaéreas ucranianas lograron derribar todos los drones y 11 misiles de crucero Kalibr. Los misiles fueron lanzados desde varias regiones de la Federación Rusa. Rusia también utilizó como plataforma de lanzamiento de algunos de los proyectiles un submarino situado en la bahía de Novorrosisk, en el noreste del Mar Negro.
“Desgraciadamente, el enemigo alcanzó de manera furtiva infraestructura portuaria”, dice el comunicado del comando Sur ucraniano. “La terminal de pasajeros del puerto de Odesa sufrió daños sustanciales”, agregó la fuente. En un hotel situado en la terminal que lleva años cerrado se produjo un incendio. “Los (misiles supersónicos) Onyx dañaron varios graneros”, añade la nota.
Además, fragmentos de los misiles interceptados provocaron desperfectos en almacenes y edificios particulares en las afueras de Odesa. Las explosiones que se produjeron durante el ataque también rompieron las ventanas de algunas viviendas e hirieron a una mujer que ha recibido asistencia médica.
Rusia ataca varias veces cada semana infraestructuras agrícolas y portuarias ucranianas desde que a mediados del pasado mes de julio diera por finalizado el llamado acuerdo del grano, por el que durante un año se comprometió con Turquía y la ONU a permitir la salida de cereal ucraniano por tres puertos del Mar Negro la región de Odesa. Los puertos del Mar Negro y del Danubio de esta región son el objetivo más recurrido de estos ataques, que también alcanzaron el centro histórico de Odesa y provocaron el 23 de julio graves desperfectos en la catedral más antigua de la urbe.
Asimismo, el Ministerio de Defensa ruso aseguró haber repelido dos ataques ucranianos en torno a Verbove y aniquilado efectivos y equipamiento bélico del enemigo en las localidades vecinas de Tokmachka, Novodanilivka y Robotine.
Ataque ucraniano
Un total de 34 militares rusos habrían muerto como consecuencia del ataque con misiles que Ucrania lanzó el pasado viernes contra la sede del Estado Mayor de la Flota del Mar Negro rusa, según aseguraron ayer las Fuerzas de Operaciones Especiales ucranianas en su cuenta de Telegram. Entre los muertos estaría el comandante de la Flota del Mar Negro, el almirante Víktor Sokolov.
Además, 105 “ocupantes” resultaron heridos en el ataque contra este edificio histórico del puerto de Sebastopol, en la península ucraniana de Crimea que Rusia se anexionó en 2014 y en la que tiene su base la Flota del Mar Negro rusa. Según la nota publicada por las Fuerzas de Operaciones Especiales ucranianas, “el cuartel general (de la Flota Rusa) no puede ser reparado”.
Ucrania intensificó durante las últimas semanas sus operaciones contra las fuerzas rusas que controlan al región de Crimea, con ataques para los que utilizó drones navales y aéreos y misiles que consiguieron destruir sistemas de defensa y provocar daños tanto en barcos como en submarinos militares rusos, según varios portavoces de Kiev.