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La esperanza en la crisis

El Celta superó al Villarreal, aunque todavía continúa en la zona de descenso a Segunda.
photo_camera El Celta superó al Villarreal, aunque todavía continúa en la zona de descenso a Segunda.
Óscar García Junyent inició su andadura en el Celta con una derrota ante el Barcelona y la victoria en Villarreal
Dos partidos con el nuevo entrenador tras una crisis de resultados y juego que conllevaron el despido de Fran Escribá, el preparador de la permanencia del pasado curso, pero que esta campaña no obtuvo los resultados esperados y el Celta se encuentra en zona de descenso. El detonante de su marcha fue la derrota en el anterior encuentro en casa, ante el Getafe por la mínima (0-1). 
El calendario deparaba un enfrentamiento contra el Barcelona y, a continuación, dos semanas de trabajo por los partidos de selecciones. Un momento ideal para el cambio en el banquillo y, de esta forma, Óscar García Junyent se hizo con las riendas del primer equipo de la entidad viguesa para tratar de enderezar el rumbo de una escuadra que generó unas expectativas altas en pretemporada, pero que estaba muy lejos de lo esperado. 
En el primer encuentro, disputado en el Camp Nou, la formación viguesa realizó un papel digno ante el líder, pero perdió en una noche de gran acierto de Leo Messi, que anotó tres goles, dos de ellos desde la frontal del área en sendas faltas. Precisamente, el Celta también marcó su gol en un libre directo por medio de Lucas Olaza. 
Los vigueses dejaron una impresión grata, pero cedieron de forma clara tras el descanso (4-1) en un enfrentamiento en el que el técnico planteó un equipo con una línea de cinco defensas para utilizar laterales largos con Hugo Mallo y David Juncá. 
No obstante, la principal prueba para el técnico nuevo estaba marcada y era para el duelo ante el Villarreal. En este enfrentamiento, el preparador ofreció una nueva versión con una clara variante táctica en la que Denis Suárez jugó claramente como segundo delantero por detrás de Aspas. De esta forma, liberado de estar en la banda, se convirtió en el futbolista decisivo en la parcela ofensiva que se espera de él. 
Asistió a Pione Sisto en el primer tanto y generó muchos problemas a la defensa local. No obstante, a la recta final se llegó con empate (1-1) y Iago Aspas aprovechó una falta lateral de Olaza para poner el 1-2 en el minuto 80. El equipo vigués tuvo que defender mucho en el tramo final tras un encuentro de buen nivel en líneas generales y el propio moañés cerró el partido en el descuento (1-3). 
Más allá del resultado, se vio a un equipo vigués con más atrevimiento a nivel táctico. Busca una presión alta sobre la salida del balón y también apretar después de la pérdida del rival. En el medio campo fueron titulares Lobotka como pivote y Pape, encargado de hacer un notable despliegue físico.n

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