La pasión por el patinaje está fuertemente enraizada en Valladares. Su club lleva casi 30 años divulgando este deporte en la parroquia y formando jóvenes tanto a nivel competitivo como social. Por eso, la sesión especial que ayer organizó este periódico junto a la entidad viguesa, fue capaz de reunir un espectacular centenar de deportistas de todas las edades en el polideportivo de la parroquia. Un éxito absoluto.
Tamara Valderrama, entrenadora principal y alma máter del Valladares, fue la principal responsable del gran resultado de esta iniciativa. La técnica se movía a toda velocidad con sus patines. Ordenaba, colocaba, dirigía a cien personas con una facilidad que impresiona. Y con cariño. El que le devolvían sus pupilas en cada palabra. “Estamos encantados de que estéis aquí. A las niñas les hace mucha ilusión”, reconoce.
“El patinaje artístico necesita mucha visibilidad e iniciativas como esta son muy necesarias para ello”, destacó la entrenadora, deportista en su día con cinco participaciones mundialistas a cuestas. Ahora, desde el papel de instructora, destaca la “ilusión” que le produce ayudar a las niñas y a los niños a convertirse en las personas del futuro. “Es importante que crezcan en un ambiente saludable”, apunta.
Pero Tamara no solo habla. Hace. Y hace mucho. Primer promovió una actuación de las más pequeñas, luego dio paso a ejercicios individuales de varias de las patinadoras más mayores y terminó con un sensacional desempeño grupal lleno de precisión y espectacularidad. Una tarde de diversión y aprendizaje, con una participación masiva. Una fiesta de pasión por el patín en Valladares