El nacimiento del hijo de los duques de Sussex ha sido sin duda el más esperado del año y que más expectación ha generado, dando a luz Meghan Markle el pasado lunes y convirtiéndose así en madre junto al príncipe Harry del séptimo sucesor al trono de la Corona Británica.
Sólo dos días después del nacimiento la pareja ha dado al mundo entero la imagen que tanto ansiábamos.
Harry y Meghan han posado ante los medios en las inmediaciones del castillo de Windsor con el recién nacido en brazos, ofreciendo así el primer y más esperado posado familiar. Esta también ha sido la primera vez que hemos podido ver a Meghan tras el parto, luciendo un vestido sin mangas color crema y con botonadura delante, luciendo todavía una pronunciada tripita.
La mujer de Harry se ha mostrado de lo más emocionada y no ha podido incluso derramar una lágrima al pronunciar sus primeras palabras: "Ha sido una experiencia muy emocionante, mágica. Tengo a los dos mejores chicos del mundo", declaraba con una amplia sonrisa mientras Harry sostenía al bebé, envuelto en una manta en el mismo tono del vestido de su mamá.
"Tiene un carácter dulce, muy calmado" aseguró. "Ha sido un sueño, han sido días muy especiales", ha continuado la duquesa que no se atreve todavía a decir a quien se parece: "Es pronto y los bebés cambian cada día". Meghan también ha confesado que toda la familia ya conoce al Baby Sussex, incluso su madre Doria Ragland, que se ha trasladado a Frogmore Cottage para estar al lado de la pareja y el recién nacido.
En cuanto a cómo atraviesan la paternidad, Meghan ha sorprendido con un espontáneo "¡Allá vamos!", mientras miraba a Harry con una amplia y emotiva sonrisa.
