La Policía Local de Santiago detectó un total de 10 fiestas en pisos en la noche del jueves al viernes, la primera en la que se aplicó el nuevo régimen sancionador. Conforme a este, una de estas celebraciones ha recibido una multa de 750 euros por haber pasado de las 03,00 de la madrugada, mientras que las nueve restantes deberán pagar 500 euros. Así lo detalló el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo, a preguntas de los medios durante el acto de reapertura de la calle Clara Campoamor al tráfico, desde donde advirtió de que los datos de evolución de la pandemia del coronavirus en la capital -con más de 240 casos activos- "no son satisfactorios", como tampoco lo es el número de fiestas en pisos registradas.
No obstante, sí admitió que las 10 de la pasada noche "son la mitad" de las 20 del jueves pasado y casi "la tercera parte" de las 28 de hace tres semanas. "Estamos yendo en una secuencia que va en la dirección correcta, pero queda camino por recorrer", reconoció el regidor. En este contexto, aprovechó para volver a pedir a los jóvenes "que se conciencien, porque asumen un riesgo inaceptable" que luego trasladan a sus familias cuando el fin de semana vuelven a sus casas: "Y queremos que hoy (por ayer viernes), cuando se vayan, transmitan seguridad".
aumento significativo
Además, Bugallo explicó que la pandemia en la ciudad tiene "un incremento no exponencial, pero sí significativo" en cuanto al número de positivos por coronavirus, porque "se están incorporando ya" los cribados realizados en las residencias de estudiantes. Sobre estos últimos, desveló que favorecen la detección "de una incidencia no alarmante, pero sí significativa", que se refleja luego en el total de casos de covid-19.
Sin embargo, señaló que Santiago está todavía "muy alejada" de ciudades como Salamanca o Granada, que desde esta semana cuentan con medidas más duras por la incidencia de la pandemia. "Justamente, todo lo que intentamos hacer es para evitar que en Santiago pase lo de Salamanca o Granada", incidió Bugallo.
Preguntado sobre la decisión de ayer del comité clínico de la Xunta, que optó por esperar a la evolución en próximos días para imponer o no más restricciones en la ciudad, el regidor compostelano dijo que lo ve "razonable" porque "da por sentado" que este órgano "cuando toma esa decisión está suficientemente sustentada" y porque los cribados realizados en residencias "aún no se incorporaron" en su totalidad.
Asimismo, Bugallo preguntó sobre las palabras del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en las que abogaba por "repensar" que las multas se fijen en función de franjas horarias, porque "el riesgo de contagio desde el punto de vista sanitario es el mismo a las 11,00 de la noche que a las 2,00 de la madrugada".
Al respecto, respondió que el Ayuntamiento impone las sanciones a las fiestas de acuerdo a la ordenanza municipal "que hace referencia al ruido y a la convivencia". "Y entendemos que una fiesta a las 4,00 de la mañana genera mucha más molestia que una a las 00,30", añadió.
Por esto mismo, de las 10 celebraciones detectadas la noche del jueves y la madrugada de ayer en la ciudad, nueve fueron pasada la medianoche, por lo que recibieron multas de 500 euros; y la restante, más tarde de las 3,00 de la madrugada, fue sancionada con 750 euros. Eso sí, en caso de reincidencia, la cuantía podría alcanzar los 1.500 euros.
El cribado en residencias descubre 14 positivos, 10 de ellos en Gelmírez
El cribado realizado en las residencias universitarias de Compostela detectó un total de catorce positivos en estas instalaciones, tanto en las públicas como de titularidad privada. El principal brote se localizó en un mismo centro el Colegio Mayor Gelmírez, con un total de 10 contagios entre los jóvenes residentes.
Todos ellos se encuentran aparentemente bien y prácticamente asintomáticos, según señaló Raúl Figuera, director de la residencia, y el centro está tomando todas las medidas indicadas por las autoridades sanitarias, tanto con el confinamiento de positivos como en la determinación de sus contactos estrechos.
A raíz de esta situación, cerca de 70 jóvenes están guardando cuarentena de forma preventiva y por iniciativa propia, a la espera de las indicaciones de los expertos sanitarios. Figuera confió en que lo ocurrido permita "tomar una conciencia muy fuerte" a la hora de cumplir con las indicaciones de seguridad y ser rigurosos con el uso de mascarilla y la distancias interpersonal.
El resto de casos de covid-19 detectados se produjeron en residencias dependientes de la propia Universidade de Santiago, tres de ellos en el Burgo das Nacións y uno en el Colexio Maior Fonseca. El propio rector compostelano, Antonio López, remitió una comunicación interna agradeciendo "el ejemplar cumplimiento de las medidas sanitarias" en los espacios universitarios, y en la que llama a continuarr respetando los protocolos y precauciones para "contribuir a frenar el avance de la pandemia".
