Los agentes de la Guardia Civil que llevan el caso de la mujer de 29 años y nacionalidad paraguaya encontrada muerta en su domicilio de O Barco con señales de violencia ya tienen clara la línea que deben seguir en su investigación: homicidio. La autopsia practicada durante la mañana de ayer en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) al cadáver de Leticia Magali Sanabria Romero -“Rosi”- fue determinante ya que confirmó que la víctima falleció por asfixia. Falleció porque la privaron de oxígeno con uso de violencia.
Ya en la primera inspección realizada en el domicilio, los agentes de la Guardia Civil habían apreciado arañazos en el cuello, unas heridas que les llevaron a apuntar la existencia de signos de violencia en el óbito de la joven, que estaba en el suelo de la habitación. En las últimas horas, la autopsia confirmó que estaban ante un posible homicidio.
Desde la Subdelegación del Gobierno en Ourense, Emilio González Afonso, indicó que en estos momentos la investigación se está centrando en el entorno de la fallecida. La puerta de la casa no estaba forzada. El subdelegado también explicó que en el registro del Sistema VioGén, creado por el Ministerio de Interior para los casos de violencia de género, “no aparece ningún antecedente ni denuncia de acoso”.
Leticia Magali Sanabria.
A su vez, conocidos y amigos de Leticia Magali consideran una “desgracia” su muerte. “Era mona, superdiscreta y reservada. Quedaba con su compañera y se pasaban una hora hablando. Siempre tenían los mismos horarios para tomar café”, comentó una hostelera barquense, quien añadió que “no bebía alcohol ni fumaba”.
Otro amigo suyo coincidió con el retrato y apuntó que “ni fumaba, ni bebía. Odiaba las drogas y el tabaco. Era muy educada y siempre llevaba una sonrisa en la cara. Añadió que llevaba unos siete años en O Barco, adonde ”vino a buscarse un futuro, sin molestar a nadie” porque en su país de origen pasaba por apuros económicos. También indicó que ahorraba para enviar dinero a su familia, en Paraguay.
Hallazgo de la joven de O Barco
Fue su compañera de piso quien encontró el cadáver. Acudió a la vivienda después de que varias llamadas telefónicas suyas quedasen sin respuesta. Eran aproximadamente las 14,00 horas del viernes cuando su alerya movilizaba a los equipos de emergencias y de investigación.
Vecinos de la fallecida indicaron que los agentes de la Guardia Civil regresaron de noche al piso, continuando una labor que había comenzado casi 12 horas antes, sobre las 14,15 horas del viernes. Ese mediodía también llegaron los sanitarios del 061 y la Policía Local, la jueza de guardia de los Juzgados barquenses, el forense del Imelga (Instituto de Medicina Legal de Galicia) a los que posteriormente se sumaría la Unidad de Homicidios de la Policía Judicial de Ourense. Seis horas después de ser alertados, era levantado el cadáver que el coche fúnebre trasladó hasta el CHUO para que le fuese practicada la autopsia.
Su llegada fue seguida por un buen número de peatones, quienes se detenían ante el edificio de la avenida de Conde de Fenosa para presenciar durante algunos momentos sus idas y venidas, mientras analizaban la vivienda
CONCENTRACIÓN DE REPULSA ANTE EL CONSISTORIO
Medio centenar de personas respondió ayer a la concentración convocada por los portavoces de los distintos grupos municipales de O Barco de Valdeorras para mostrar su repulsa “pola violenta morte dunha muller ocurrida no noso Concello”. Durante la misma, el alcalde, Alfredo García Rodríguez, aseguró carecer de información suficiente de los hechos. Consideró que el programa del Cristo 2021 es cultural, aunque “poderían ser incompatibles certas actividades coa situación de loito e dolor e de solidariedade con esa muller”. Añadió que los portavoces tomarán una decisión una vez reciban la información necesaria.
