El líder de Vox afirma que "España no se discute; se defiende hasta las últimas consecuencias"
El presidente de Vox, Santiago Abascal, apeló ayer a "rescatar" en estos comicios a todas aquellas personas "que quieren una España más unida" para lo que hizo un llamamiento a llenar el día 28 las urnas de "rojigualdo", en alusión a los colores de la bandera española. En un mitin en el Palacio de Congresos y Exposiciones de A Coruña (Palexco), ante unas 1.500 personas, el aforo completo, aseguró que el PSOE es "el enemigo". "Ni obrero ni español", expuso en una intervención con críticas a la "derechita cobarde" del PP, a la "veleta naranja" de Ciudadanos, al "comunismo chavista" de Podemos y a los independentistas.
Frente a ello, el "proyecto patriótico" de Vox, un partido que aseguro busca "ocupar el espacio de los que quieren una España entera", señaló en alusión al intento secesionista en Cataluña. "Vox es un movimiento patriótico al servicio de la unidad de los españoles y un partido que ha conectado con el sentido común". "Porque de sentido común es defender nuestra patria", argumentó.
"ESPAÑA NO SE NEGOCIA"
En la misma línea, expuso que "España ni se vota, ni se negocia, ni se discute, se defiende hasta las últimas consecuencias", rechazando cualquier intento independentista. En una intervención en la que calificó a Vox como el partido que "más y mejor defiende" a las mujeres frente al "supremacismo feminista" que, a su juicio, promueven otras formaciones, hizo también referencia a las protestas contra este partido, como la de un centenar de radicales de izquierda que se congregó ante el Palexco. "Son la vanguardia de la capucha y la porra de Pedro Sánchez", argumentó.
Por otra parte, Abascal no escatimó críticas al presidente del PPdeG y titular del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, al que tildó de "cacique", de "soberbio" y de "chuleta". "El mentiroso Feijóo, que dice que Vox es un instrumento para el PSOE, si el PSOE eres tú, que mantienes sus políticas", incidió dirigiéndose al presidente de la Xunta.
"Vengo sin pedir perdón ni permiso, me siento como en mi casa", afirmó también para cuestionar que Feijóo argumentase que Vox no tenía "cabida en Galicia". De esta autonomía, aseguró que es "una región entrañable de la nación española". Ante un auditorio con numerosas banderas españolas, también reprochó al PP y a Ciudadanos "comprar la mercancía averiada de los progres".
Con anterioridad a este mitin, Abascal se dirigió a los centenares de personas que se quedaron sin poder entrar al Palexco, a los que agradeció también su respaldo a la formación.
