El Ejército acudirá al municipio oscense de Albalate de Cinca para ayudar a contener el brote
n n n La cifra de contagios de coronavirus detectados en las últimas 24 horas alcanzó ayer un nuevo máximo desde el fin del estado de alarma y el comienzo de la nueva normalidad con 390 positivos, 127 más que el martes, de los que 160 han sido diagnosticados en Aragón y 91 en Cataluña. De los más de 120 focos que están activos en la actualidad, los más preocupantes siguen siendo los que atenazan la comarca leridana del Segrià, donde ya han fallecido cuatro personas desde que se decretara su cierre perimetral el pasado 4 de julio.
Gobierno y comunidades coincidieron ayer en la necesidad de mantener la campaña de la fruta porque es una actividad "esencial", pero sin generar o agravar un problema de salud pública asociado al coronavirus, que achacan más a las condiciones de vida o de transporte de los temporeros que a su trabajo. Es a la conclusión que llegaron los ministros de Sanidad, Salvador Illa, y de Agricultura, Luis Planas, con las once autonomías en las que la actividad agrícola y frutícola atrae a más temporeros.
Lleida registra una cincuentena de brotes y agrupaciones de casos (personas positivas sin relación entre ellas) de covid-19, la mayoría en la comarca del Segrià; la velocidad de contagio es muy elevada, por lo que las autoridades no descartan aumentar las pruebas PCR. En Cataluña, también preocupan los brotes en L'Hospitalet, ya con medidas restrictivas, y Barcelona.
Paralelamente, el detectado en un asentamiento ilegal de temporeros en Albalate de Cinca, en Huesca, que retrocedió a una fase 2 "flexibilizada"-, afecta ya a más de una veintena de estos trabajadores sobre un total de treinta. Allí está previsto que el Ejército de Tierra acuda para ayudar en las labores de contención y estudiar la instalación de infraestructuras para albergar a las personas que hayan dado positivo, tal y como pidieron las autoridades comarcales.
El Departamento vasco de Salud cerró el camping Talai Mendi de Zarautz tras detectar dos casos positivos y está sometiendo a pruebas PCR a los 250 clientes..
Gobierno y comunidades coincidieron ayer en la necesidad de mantener la campaña de la fruta porque es una actividad "esencial", pero sin generar o agravar un problema de salud pública asociado al coronavirus, que achacan más a las condiciones de vida o de transporte de los temporeros que a su trabajo. Es a la conclusión que llegaron los ministros de Sanidad, Salvador Illa, y de Agricultura, Luis Planas, con las once autonomías en las que la actividad agrícola y frutícola atrae a más temporeros.
Lleida registra una cincuentena de brotes y agrupaciones de casos (personas positivas sin relación entre ellas) de covid-19, la mayoría en la comarca del Segrià; la velocidad de contagio es muy elevada, por lo que las autoridades no descartan aumentar las pruebas PCR. En Cataluña, también preocupan los brotes en L'Hospitalet, ya con medidas restrictivas, y Barcelona.
Paralelamente, el detectado en un asentamiento ilegal de temporeros en Albalate de Cinca, en Huesca, que retrocedió a una fase 2 "flexibilizada"-, afecta ya a más de una veintena de estos trabajadores sobre un total de treinta. Allí está previsto que el Ejército de Tierra acuda para ayudar en las labores de contención y estudiar la instalación de infraestructuras para albergar a las personas que hayan dado positivo, tal y como pidieron las autoridades comarcales.
El Departamento vasco de Salud cerró el camping Talai Mendi de Zarautz tras detectar dos casos positivos y está sometiendo a pruebas PCR a los 250 clientes..
