En el sexto aniversario del referéndum ilegal celebrado el 1 de octubre de 2017 en Cataluña, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha pedido este domingo unidad al independentismo para hacer realidad un nuevo referéndum cuyo resultado sea "respetado e implementado". Así lo ha dicho en una declaración institucional desde Fonollosa (Barcelona), municipio en el que la Guardia Civil actuó para evitar la votación.
"Lo haremos con toda la convicción, buscando el punto de encuentro que debemos ser capaces de construir", ha afirmado. Ha señalado que la amnistía es necesaria para "culminar el fin de la represión y para acabar con la persecución del independentismo", pero ha asegurado que, por si sola, no resuelve el conflicto político.
"Si el Gobierno quiere resolver realmente el conflicto de soberanía con Cataluña, debe escuchar y atender la demanda amplia, transversal y mayoritaria en Cataluña" para un referéndum, ha señalado.
Negociación para la investidura de Sánchez
Ha celebrado que la autodeterminación y la amnistía sean un "punto de coincidencia" entre los independentistas y que los diputados obtenidos por Junts y ERC en las elecciones generales puedan ser clave en la negociación de una posible investidura del presidente del Gobierno en funciones y candidato del PSOE, Pedro Sánchez.
Sin embargo, ha augurado unas negociaciones complejas y que habrá voces "desde la caverna que se opondrán, amenazarán e intentarán" hacerles callar para oponerse a las demandas de los independentistas.
"Saber sumar, hablar, escuchar y darnos cuenta de que no estamos tan lejos los unos de los otros. Partir de la voluntad de entender y llegar a acuerdos y siempre mirar hacia adelante", ha insistido.