La economía viguesa lanza un SOS ante la situación de colapso que está sufriendo y que va a desembocar en una oleada de ERTES, paros en la producción y pérdida de carga de trabajo. La escasez de materias primas, el precio desbocado de la electricidad, el impacto de la guerra en Ucrania y la huelga del transporte conforman “la tormenta perfecta”. “La situación es muy compleja, la más difícil de las dos últimas décadas, nunca ha habido un momento de tantísima dificultad a la hora de organizar una empresa”, indica Enrique Mallón, secretario general de Asime, que apunta que en la industria metalúrgica ya se están produciendo paros y negociando ERTES. “Se van a parar turnos de manera puntual para intentar aligerar costes e intentar producir en las horas de menor coste energético sobre todo en automoción y las empresas vinculadas a la extrusión del aluminio".
Éste es uno de los metales que mayor impacto tiene en la industria junto con el acero o el paladio. “Todos los materiales escasean, absolutamente todos, los precios se dispararon y las variaciones son casi diarias, lo cual dificulta muchísimo hacer una planificación de costes ordenada, con seguridad y estabilidad y no se puede garantizar una rentabilidad del proyecto", explica Mallón.
En esta misma línea se manifiesta Óscar Gómez, gerente del Clúster Naval de Galicia (Aclunaga), que constata que los nuevos contratos se están retrasando. “Los armadores están bloqueados y la mayoría de los proyectos parados por la gran incertidumbre que hay. Había dos contratos ya con documentos sobre la mesa que no se llegaron a plasmar”, apunta Gómez acerca de los astilleros que “se mantienen” y con dos bajas, las de Barreras y la antigua Vulcano que están sin actividad. “En la industria auxiliar sí se esperan ERTES, la crisis de los precios y la escasez de las materias primas están afectando muchísimo sobre todo el acero inoxidable y el aluminio”.
Hormigón, cemento, acero, áridos, madera. La lista de productos que escasean es interminable también en el sector de la construcción. “Falta de todo y la huelga del transporte es la puntilla para las empresas que están viviendo una situación insostenible cuando todo parecía que iba a ir a mejor”. Así se manifesta el presidente de la Asociación de Constructores de Pontevedra (ACP), Miguel Caruncho, que avanza que habrá que echar mano de los ERTE ante la paralización de las obras. “Hay bastantes paradas pero a partir del lunes podrían ser todas si la huelga de los transportistas continúa porque no nos llega material". “Ni en pandemia estuvimos tan mal, nuestro sector capeó bien y mantuvimos el empleo y carga de trabajo hay y se iba a mejorar con los fondos europeos de reestructuración. Veremos qué pasa", argumenta.
Es precisamente la incertidumbre lo que más preocupa al entramado empresarial, especialmente a las pymes “porque tienen menos músculo financiero y un menor nivel de internacionalización”. La crisis de los materiales está afectando de manera muy relevante sobre todo a la industria del metal y también a la construcción", apunta David Sobral, secretario general de la Federación Gallega de Parques Empresariales (Fegape).
Stellantis Vigo reprograma otra vez la producción: menos coches y trabajadores
La factoría de Stellantis Vigo reabrirá sus puertas el día 22 tras dos semanas cerrada y lo hará con menos producción y turnos de trabajo y deja de fabricar los fines de semana de manera temporal.
Inicialmente vuelve el sistema 1, donde se montan el todocamino y los sedanes, que arrancará el próximo martes con todos los turnos (mañana, tarde y noche) pero a martir del miércoles sólo habrá dos equipos -se irán alternando- y la cadencia será más baja, 27,5 vehículos a la hora. La empresa decidió que se fabricará un mix del Peugeot 2008 eléctrico (sólo se hará esta versión por el momento) y del C-Elysée y el 301 debido a la falta de suministro de componentes.
Chips y huelga
A la escasez de los microchips se suman ahora los problemas que está ocasionando la huelga del transporte de mercancías para el traslado de las piezas. De ahí que la línea 2 de producción de la factoría -furgonetas y monovolumen- retrase su vuelta al trabajo hasta el martes 29 siempre y cuando el aprovisionamiento de componentes lo permita.
La carga de trabajo a la baja en Stellantis Vigo arrastrará a toda la industria auxiliar que también se está viendo afectada por otros fabricantes de coches que están parando en España como Volkswagen Navarra, Mercedes Vitoria o Opel Zaragoza. Toda la industria viguesa de la automoción tiene Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTES) en vigor que ya están usando y que, con toda probabilidad, se intensificarán en los próximos días.
