n n n El empresario ourensano José Manuel Díaz Barreiros, que dimitió después de dos días como presidente de la patronal gallega, descartó ayer volver a presentarse en las nuevas elecciones que la institución prevé convocar para el próximo 15 de enero, pese a que, según matizó, "desde el primer día que renuncié recibí muchos apoyos para hacerlo". "En ningún momento he tenido intención de volverme a presentar, por lo que no necesito apoyos de ninguna asociación sectorial ni ninguna confederación empresarial. Me autodescarto", manifestó ayer.
Lo que sí avanzó Díaz Barreiros es que permanecerá en la comisión ejecutiva de la Confederación Empresarial de Galicia para "defender a la institución y representar a la Confederación Empresarial de Ourense". Asimismo, Díaz Barreiros se puso a disposición del presidente elegido "ofreciendo mi colaboración y lealtad".
Para evitar malentendidos, negó haber renunciado por razones personales, sino "porque había tres asociaciones y la Confederación de Empresarios de Pontevedra que no dudaron de mí como presidente, que era el único candidato, sino de cómo se había desarrollado el proceso. Esa fue la única causa de mi renuncia, que hice para proteger el buen nombre de la institución y de la presidencia".
Díaz Barreiros explicó ayer además que un grupo de asociados "quiso poner en duda la figura del presidente desde el primer momento" y por eso optó por dar un paso al lado "pese a haber recibido el 75% de los apoyos". En ese sentido, el empresario ourensano defendió el desarrollo del proceso "que se hizo en base a la normativa de la CEG", proceso que el propio Díaz Barreiros recordó ayer fue supervisado y validado por el secrerario general de la Confederación.
propuesta electoral
La junta de vicepresidentes aprobó ayer la propuesta de elecciones para el 15 de enero, las cuartas en año y medio para la patronal gallega, después de las dos que quedaron desiertas, en julio y septiembre de 2019, y otras que la pandemia del coronavirus obligó a aplazar, previstas para el pasado 30 de abril.
La retirada de Pedro Rey, el otro candidato junto a Díaz Barreiros, se produjo en las elecciones del pasado martes a cinco minutos de la votación presencial, por lo que esta no llegó a producirse y motivó la "disconformidad" de sectoriales que, "obligadas" por la Confederación de Pontevedra, pusieron en duda la claridad del proceso.
Pontevedra, con Jorge Cebreiros a la cabeza; Lugo, con Jaime López, o Coruña, que lidera el "omnipresente" Antonio Fontenla -enfrentado a todo y a todos- continuaron ayer con sus críticas a un proceso que ellos mismos auspiciaron para llenar después de obstáculos en una CEG que continúa sin presidente y con Fontenla ejerciendo como "portavoz" desde enero de 2018, cuando abandonó el puesto Antón Arias. Previamente se fueron Antón Dieter Moure (ahora muy crítico con Fontenla, presidente de la patronal coruñesa y auténtico "tejedor" de pactos inasumibles), y José Manuel Fernández Alvariño (histórico rival del coruñés cuya gestión acrecentó los enfrentamientos internos en la confederación).n
