El tomiñés finalizó octavo en K1 1.000 metros y el K4 500 del cangués ganó la semifinal
Roi Rodríguez todavía no pasó el corte y sí lo hizo Rodrigo Germade, pero el K4 500 español aún no está clasificado para los Juegos Olímpicos de Tokio debido a las limitaciones continentales.
En la categoría de K1 1.000 metros, el palista del Kayak Tudense paleó en una final dura y rápida en la que estaban en juego cinco posiciones para la cita olímpica y salió a un ritmo alto para tratar de luchar por ellas. El del Baixo Miño aguantó el cuarto puesto hasta mitad de prueba, pero después careció de cambio para mantener la posición y cayó hasta la octava en la meta en una prueba en la que obtuvo el triunfo el húngaro Balint Kopasz. En Szeged se ponían en juego cinco billetes para Tokio y, aunque todavía pueden entrar más palistas en función de las reasignaciones y los cupos al término de la jornada, todo indica que Roi Rodríguez tendrá que buscar el billete en los preolímpicos de 2020 en el caso de que España no cubra las seis plazas de máximo a las que tiene derecho en el kayak masculino. Ayer logró el billete Carlos Garrote, en K1 200, al cosechar la medalla de bronce.
Hoy se disputan las finales de K2 1.000 metros (12:00) y de K4 500 (13:21), también pruebas olímpicas. En el barco de cuatro componentes se reparten diez billetes para los Juegos, pero con una limitación por continentes y, de hecho, sólo pueden ir siete barcos europeos como máximo a la cita japonesa y. Por este motivo, la tripulación compuesta por el cangués Rodrigo Germade, el betanceiro Carlos Arévalo, Saúl Craviotto y Marcus Cooper necesitan hoy finalizar séptimos en una final exclusivamente europea. Ayer, en las semifinales, ganaron la suya con notable autoridad, pero realizaron el tercer mejor tiempo del día.
Por su parte, la embarcación femenina de K4 500, con la grovense Natalia García y la palista del Kayak Tudense Sara Ouzande, no se metió en la final y se queda sin opciones de acudir a los Juegos de Tokio.n
En la categoría de K1 1.000 metros, el palista del Kayak Tudense paleó en una final dura y rápida en la que estaban en juego cinco posiciones para la cita olímpica y salió a un ritmo alto para tratar de luchar por ellas. El del Baixo Miño aguantó el cuarto puesto hasta mitad de prueba, pero después careció de cambio para mantener la posición y cayó hasta la octava en la meta en una prueba en la que obtuvo el triunfo el húngaro Balint Kopasz. En Szeged se ponían en juego cinco billetes para Tokio y, aunque todavía pueden entrar más palistas en función de las reasignaciones y los cupos al término de la jornada, todo indica que Roi Rodríguez tendrá que buscar el billete en los preolímpicos de 2020 en el caso de que España no cubra las seis plazas de máximo a las que tiene derecho en el kayak masculino. Ayer logró el billete Carlos Garrote, en K1 200, al cosechar la medalla de bronce.
Hoy se disputan las finales de K2 1.000 metros (12:00) y de K4 500 (13:21), también pruebas olímpicas. En el barco de cuatro componentes se reparten diez billetes para los Juegos, pero con una limitación por continentes y, de hecho, sólo pueden ir siete barcos europeos como máximo a la cita japonesa y. Por este motivo, la tripulación compuesta por el cangués Rodrigo Germade, el betanceiro Carlos Arévalo, Saúl Craviotto y Marcus Cooper necesitan hoy finalizar séptimos en una final exclusivamente europea. Ayer, en las semifinales, ganaron la suya con notable autoridad, pero realizaron el tercer mejor tiempo del día.
Por su parte, la embarcación femenina de K4 500, con la grovense Natalia García y la palista del Kayak Tudense Sara Ouzande, no se metió en la final y se queda sin opciones de acudir a los Juegos de Tokio.n
