La pieza celeste más cotizada en el mercado es Maxi, pero dispone de más futbolistas para hacer caja si lo decide
Llega, en breve, el mercado de verano y el Celta, como la gran mayoría de clubes, se somete al escrutinio al que el resto de equipos realizarán de su plantilla, buscando un futbolista que solvente una gran necesidad por un módico precio. El conjunto vigués presume de una bonanza económica que provoca que no sea imprescindible para su subsistencia alguna venta de relumbrón, pero la mala temporada recién terminada y la situación personal de alguno de sus futbolistas hace prever movimientos de salida que signifiquen algún que otro ingreso en las arcas celestes.
El cálculo del valor de un futbolista es un arte complicado y variable. Porque, como es obvio en una economía de mercado, un jugador vale exactamente lo que alguien esté dispuesto a pagar por él en la puja o, en último caso, lo que señale su cláusula de rescisión. El observatorio estadístico especializado suizo CIES ha elaborado una metodología para determinar el valor de los futbolistas en base a numerosas variables tanto del mismo como del club al que pertenece: rendimiento en el equipo y en la selección, resultados, edad, posición, liga, nivel económico de su club, duración de contrato, año del fichaje, nacionalidad, poder económico de los clubes que lo siguen...
Con todo este compendio de datos, a cada uno de los actuales integrantes de la plantilla del Celta –salvo a Gustavo Cabral y a Sergio Álvarez, por estimar que acaban contrato aunque el meta sí tiene y está a expensas de la posibilidad que tiene el Celta de cortarlo– se le ha asignado una horquilla de valor que da una pista de lo que el club vigués puede esperar en este mercado. Y, como no podía ser de otra forma, la gran perla es Maxi Gómez. El delantero uruguayo es valorado entre 40 y 50 millones, esta última cifra en la que tiene fijada su cláusula de rescisión.
Ya muy lejos del goleador charrúa se encuentra el cuarteto de célticos que ocupan ese segundo peldaño en cuanto a su valor: Iago Aspas –recién renovado– comparte horquilla de entre 15 y 20 millones con otro canterano como Brais Méndez, que ya ha debutado con la selección española absoluta; con Fran Beltrán, joven centrocampista por el que el Celta ya pagó el pasado verano una cláusula de 8 millones de euros; y con Stanislav Lobotka. El eslovaco, pese a haber bajado su cotización con respecto a hace un año, sigue siendo una de las piezas más vendibles si el club decide ponerlo en el mercado.
Okay e Inglaterra
El siguiente en aparecer en el ránking es el internacional turco Okay Yokuslu. Según este centro de observación, el otomano se ha revalorizado de manera notoria desde su llegada a Vigo a cambio de unos 6 millones de euros y se mueve ahora entre los 10 y los 15. Precisamente el pasado viernes en Inglaterra apuntaban al presunto interés del Tottenham y su agente, Batur Altiparmak, reconoció que "hay interés de equipos de la Premier y de la Liga. Pero él es jugador del Celta y sería un error dar nombres ahora".
Un peldaño más abajo se sitúa otro trío de célticos: el meta canterano Rubén Blanco, que ha alcanzado la cima de su carrera en cuanto a valor y, dada su juventud y su rendimiento, es colocado entre los 7 y los 10 millones de euros. Compartiendo valor con el central mexicano Néstor Araujo, al que la temporada en la Liga ha revalorizado ligeramente –se estima que el Celta pagó por él 7 millones–, y con Pione Sisto, que ha pasado una campaña muy difícil en lo anímico que ha mermado su rendimiento, por lo que se complica una posible salida por esta cantidad.
En la horquilla entre 4 y 7 millones se mueven cuatro célticos: Hugo Mallo, que renovó el pasado verano con el Celta; David Juncá, que llegó libre a Vigo también hace un año; Mathias Jensen, que costó 5 millones y apenas ha podido jugar; y Emre Mor. Este último caso es el más devaluado respecto al coste de su fichaje hace dos temporadas. Aquellos 13 millones han caído con estruendo y lo de los 7 millones suena optimista.
Un poco más abajo, entre 2 y 4 millones, se valora a seis jugadores: Jozabed, David Costas, Iván Villar, Lucas Olaza, Hjulsager y Facundo Roncaglia, este último cedido la segunda mitad de la actual temporada en el Valencia. Por último, cierran la lista el canterano Kevin Vázquez, con escasísimas oportunidades de mostrarse durante el curso, y Claudio Beauvue. El ariete lleva dos cesiones consecutivas en las que, lejos de revalorizarse, ha ido perdiendo valor: aquellos 5 millones de 2016 han quedado en el olvido y aún tiene dos temporadas más de contrato.n
