Era la opción más plausible la pasada semana y ya se ha concretado. El Conservas Orbe Porriño, de la División de Honor, ha solicitado un expediente de regulación de empleo (ERTE) que afecta a su plantilla de jugadoras, dado que la competición se ha aplazado de manera indefinida. De hecho, en la entidad del Louro se considera que será realmente complicado retomar la liga y la hipótesis de que la temporada se dé por terminada gana enteros cada día que pasa.
El club porriñés puso en marcha el proceso ayer mismo, después de habérselo comunicado a todas y cada una de sus jugadoras y de haber recabado la documentación precisa tanto de la Federación Española como de la Gallega. El expediente no afecta únicamente a las jugadoras, sino que se extiende también a los técnicos que trabajan en la entidad, entre ellos el propio presidente, Abel Estévez.
La cuestión que rodea ahora a todas las solicitudes es el grado de exigencia para su aceptación. El equipo femenino porriñés de balonmano, justo al masculino del Frigoríficos del Morrazo, son de los pocos del área de Vigo que tienen el suficiente número de jugadores y jugadoras dados de alta en la seguridad social como para poder acogerse a esta medida, que deja en suspenso la relación laboral hasta el final del actual estado de alarma. A día de ayer, el Frigoríficos del Morrazo, que inició los trámites la pasada semana, no tenía respuesta alguna.
Una medida común
La adopción de ERTEs se extiende por el territorio español y afecta a todos los deportes. En Vigo, además de la posibilidad de que el Celta se apunte, ya ha iniciado los trámites el Coruxo, conjunto de la Segunda B de fútbol.n
