El ciclista porriñés Sergio Lorenzo recala en el conjunto moañés del High Level-GSport hasta final de temporada. Una transferencia de licencia acordada entre su club de origen, el Laboral Kutxa -una de las mejores canteras a nivel nacional- y el conjunto moañés, que no perderá el tiempo y lo pondrá en la línea de salida mañana en la Volta a Galicia. “Mi equipo no tenía pensado correr la prueba gallega y me surgió la posibilidad de hacerlo con el GSport, así que ni me lo pensé. Llegaron a un acuerdo para transferir la licencia hasta final de temporada, y competiré esta cita y alguna otra”, indicó el corredor.
La posibilidad de que Lorenzo participe en la Volta a Galicia se debe a una especie de cesión, como se denominaría en el argot futbolístico, pero de una forma parcial porque “en el ciclismo desde hace un par de años las cesiones como tal están prohibidas y han tenido que transferir la licencia. Entonces, a partir de ahora, estoy a disposición del GSport hasta final de temporada”. El futuro, sin embargo, todavía no lo contempla: ”No sé qué pasará después y no puedo decir mucho más".
El joven escalador de 20 años pasa por ser una de las grandes esperanzas del ciclismo autonómico. Está a punto de terminar su segunda campaña como sub-23 y tanto el año pasado como este representó a la selección de Galicia en el Campeonato de España. Aseguró que competir en tierras gallegas “siempre es especial y además creo que llego en buena forma” y que, con una competición montañosa que se adecúa a sus cualidades, Lorenzo señaló que irá "a pasármelo bien y a intentar quedar lo más arriba posible”.
En su debut con el maillot moañés, no quiso marcarse objetivos excesivamente ambiciosos, pero sí lograr buenas sensaciones en la carretera y “luchar por victorias parciales o algún maillot secundario. En principio, el perfil me gusta y voy a correr con ganas, pero paso a paso”. Eso sí, no se olvida de lo más importante para un ciclista que es “acabar la carrera. Ese es el principal objetivo. Luego veré donde me va situando”. Natural de Porriño, no escondió su ilusión por volver a correr cerca de casa después de varios meses -a excepción de la Vigo Copa España en mayo, donde consiguió el Premio de la montaña- compitiendo lejos de ella. “El público siempre apoya más a los de casa y eso siempre ayuda a tener ese extra de energía. Tengo ganas, estoy seguro que va a ser muy bonito", declaró el joven escalador.