taekwondo

Un Mundial a distancia

Raquel Guillén acudió el lunes al Tao ubicado en la calle Coruña para grabar su 'poomsae'.
photo_camera Raquel Guillén acudió el lunes al Tao ubicado en la calle Coruña para grabar su 'poomsae'.
Raquel Guillén, del Tao vigués, se metió en la semifinal femenina individual de técnica

La pandemia del Covid-19 obliga a reinventarse. Crece el comercio online, el teletrabajo y, en el deporte, incluso se comienzan a ver competiciones oficiales online. En el taekwondo, se disputa el Campeonato del Mundo de técnica a distancia y la deportista del Tao vigués Raquel Guillén se metió en las semifinales de la categoría absoluta femenina. Eso sí, individual, ya que la Federación Internacional optó por no hacer parejas o tríos para evitar juntar a no convivientes. 
"Prefiero la competición en vivo, con jueces y en directo, pero así está bien. Hay otros deportes que no tienen nada", explica la taekwondista del Tao, que ya tiene grabada su actuación de semifinales para presentar al jurado, que valorará por vídeo el 'poomsae'. "Entrar en la final está complicado porque están las mejores del mundo y me tocó un grupo duro. De 16 que somos, sólo pasan 4 a la pelea por las medallas", relata Guillén. 
La principal diferencia entre competir en un Campeonato del Mundo y el actual es que en la primera ronda y en la semifinal, la criba se realiza a través de un vídeo enviado y, por lo tanto, "puedes hacerlo la veces que precises hasta que entiendes que te salió bien. En directo, sólo hay una opción, nada más. Pero esta norma es para todas, así que estamos en igualdad", explica la taekwondista. Si logra entrar en la ronda definitiva, el triunfo se resolvería en directo porque la final sería por videoconferencia. Ahí no hay margen de error. 
La representante del Tao está contenta del ejercicio realizado pero "soy muy exigente y siempre encuentro cosas que se pueden mejorar". A pesar de que tiene un ejercicio ya escogido, hoy realizará otro por si es mejor y enviarlo. Es el último día para hacerlo. 
A pesar de que las citas online no son iguales a las presenciales, Guillén explica que en estos meses son de vital importancia porque "vas a entrenar y lo pasas muy bien. Pero, al final, lo haces para competir y para ganar. No ir a campeonatos hace que no tengas esa exigencia de obligarte a mejorar. Si no llega a ser por estos eventos online, no podría mantener la exigencia". Y ello significa aprender ciertos trucos para "que el vídeo quede mejor. Nos ayudamos todos en el club y vemos la hora del día en el que hay mejor luz, cómo se ven mejor los movimientos y así. Tenemos que aprender estas cuestiones". 
Son aspectos que pueden tener cierta influencia y esos detalles que también hay que pulir. Una adaptación a la nueva realidad del taekwondo a través de la red. 

Alicante por Vigo
Raquel Guillén reside en Vigo desde hace dos años y llegó a la ciudad para "entrenar todos los días con el Tao. Antes ya estaba con ellos, pero venía desde Alicante cuando podía". Ahora, cursa enfermería y tiene un palmarés notable a nivel internacional. "Y eso que las asiáticas viven por y para esto. Le ponen todo su tiempo".

La familia Meilán entra en las semifinales con el dúo y el trío 

Miguel, Martina y Samuel Meilán durante la grabación de un ejercicio.

 De forma paralela al Campeonato del Mundo individual, la Federación Internacional también celebra una prueba Open para categorías inferiores y familias. "Como hacer una competición para duos y tríos era complicado por el tema de los no convivientes, sacaron la versión para familias", explica Samuel Meilán, del Tao. 
"Yo me apunté en parejas con mi hija, que empezó el año pasado. Le gustó y fue ella la que le dijo al abuelo si hacíamos un trío familiar. Y, claro, no iba a negarse", relata el taekwondista. De esta forma, en ambas versiones llegaron a semifinales. Pasar de ronda parece complicado para el dúo porque "hay mucho nivel. Al ser sólo dos, pueden encontrar un familiar con un nivel alto. Pero en el trío sí que tenemos más opciones de llegar a la final porque no es tan fácil hallar a un abuelo en forma", relata el del Tao. En su caso, los Meilán están formados por Miguel (55 años), Samuel (36) y Martina (6). Y, como anécdota, la que impulsa al grupo es la pequeña porque "ella nunca se equivoca. Al ser la más pequeña, es la que va más rápido y es a nosotros a los que nos cuesta seguir el ritmo".n

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