El Guardés cumplió con su objetivo mínimo en Liga ayer, al sellar su permanencia en la máxima categoría con una cómoda victoria ante Zuazo. Con su parte cumplida, necesitaba que Granollers no ganase a Beti Onak o bien que Gijón perdiese en Elche. No hizo falta ni elegir. Los dos supuestos se cumplieron y el conjunto miñoto garantizó su presencia en el play-off por el título y en una División de Honor en la que el año que viene cumplirá doce años consecutivos. Además, aprovechó el pinchazo de Aula para subir al sexto puesto.
De esta forma, el conjunto miñoto se va al parón de selecciones con la máxima tranquilidad. Gracias a un partido muy serio, que cerró una maratón de siete encuentros en tres semanas de la mejor manera. La defensa funcionó como un reloj, Carratú y Sempere pararon y Daniela Moreno y Carla Gómez estuvieron acertadas de cara a la portería contraria. Todo bajo el ambiente festivo y lúdico de A Sangriña, que no dejó de animar en ningún momento.
