Beauvue sabe que el Celta no cuenta con él y quiere evitar otra cesión
La historia de Claudio Beauvue con el Celta no ha salido como deseaban las dos partes cuando en enero de 2016 unieron sus caminos con una ambicioso contrato de cinco temporadas y media de duración y una cláusula de rescisión de 40 millones. Tres años y medio después, el delantero acumula las dos últimas campañas como cedido, primero en el Leganés y el curso recién terminado en el Caen, y afronta el verano sabiendo de primera mano que el club celeste no cuenta con él dentro de la planificación de la próxima temporada pese a que busca delanteros.
El entorno del jugador tiene claro que el ariete tendrá que volver a sumergirse en el mercado veraniego, pero esta vez con una diferencia: la preferencia del lado del jugador, a la que no se niega el club ni mucho menos, es salir traspasado y poner fin a una relación contractual a la que todavía le restan dos años más. Como es obvio, todo dependerá de las opciones que le aparezcan al futbolista en los próximos meses y que las condiciones del traspaso convenzan a un Celta que en su momento pagó más de cinco millones de euros por el delantero al Olympique de Lyon. La lesión en el talón de Aquiles sufrida al poco de llegar, el 16 de abril de 2016, ha marcado la estancia del jugador en el conjunto celeste, con el que en este tiempo ha jugado 32 partidos, anotando tres goles y dando dos asistencias.
A los 31 años
La ocasión parece propicia para que la relación de Beauvue, que ha hecho gran amistad con buena parte del vestuario celeste, con el Celta llegue a su fin. El jugador y su entorno creen que el hecho de encadenar cesiones le está perjudicando al impedir un mayor grado de implicación en las dos direcciones. Por eso, a sus 31 años, el delantero quiere un destino en el que poder asentarse en la que podría ser la recta final de su carrera.n
