Dudas, desazón, temor. Incertidumbre. Son sentimientos comunes a cualquiera en estas semanas de confinamiento obligado por la pandemia mundial del coronavirus. Algo nunca antes vivido. Algo nunca antes sentido. Esa inquietud frente a lo desconocido brota en cada ser humano de forma diferente. Porque el miedo es libre. Pero las cadenas de la responsabilidad te atenazan cuando eres la cabeza visible de un grupo de personas. Cuando eres el presidente de un club o una federación y debes estar al tanto de su bienestar en el presente y, casi más importante, en el futuro. Cuando tu desasosiego no es solo el tuyo: es el de todos.
1 Carlos Álvarez (Celta)
El presidente del Celta Zorka Recalvi vive la situación con "una enorme preocupación" recluido en su casa. "Al menos tengo una terracita en la que puedo trabajar", apunta. El dirigente siente "una incertidumbre muy grande y cierto temor" de cara al futuro. "Esto nos complica muchísimo más las cosas", dice Álvarez, que pide ayuda a las administraciones. "Es necesario para salvar el club", expresa con claridad. "Tenemos que ser solidarios y pensar en la salud de todos. Ser pacientes y saber que las cosas van a ser duras", confiesa con resignación el presidente del Bosco, que cree que para "levantar el vuelo" va a ser necesaria una mezcla de "entusiasmo y generosidad" por parte de clubes e instituciones. "Vamos a tener que reinventarnos", concluye.
2 Abel Estévez (Porriño)
Para el presidente del club rojo, lo más importante es que las autoridades sanitarias "no estén saturadas y den abasto" con esta pandemia. "El impacto económico en la sociedad va a ser grande y obviamente eso nos va a incluir a nosotros", reconoce el alma máter de un Porriño que ya ha solicitado un ERTE "para proteger la viabilidad económica del proyecto". A nivel humano, Estévez no tiene reparos en confesar que lo lleva "con preocupación", sobre todo "a nivel económico" por patrocinios que ha dejado de percibir o ingresos ya perdidos por actividades del club. "Hay jugadoras que lo están pasando peor", confirma el presidente, pendiente de todas ellas. Con todo, no pierde la esperanza: "Esperemos que la sociedad se recupere y podamos volver a la normalidad".
3 Guillermo Touza (Club Vigo)
"Esto no lo ha vivido nunca nadie. Es una situación excepcional que necesita soluciones excepcionales", comenta Touza. "Si temporal es la pandemia, temporal es la reclusión", destaca, al tiempo que confiesa que le da "pena" por los niños. Pero el veterano mandatario del volei vigués espera que en verano, la playa pueda "compensar la inactividad perdida". Y con respecto a los jugadores del primer equipo, Touza expresa que mantiene el contacto con ellos. "Echan en falta el ejercicio pero lo sustituyen con rutinas en casa", concluye.
4 Chechu Beiro (Iberconsa Amfiv)
El máximo responsable del Amfiv afirma estar "tranquilo" por los niños de su escuela y por los jugadores del primer equipo, "que lo llevan bien" pese al confinamiento. "Estoy muy nervioso por otras cosas", explica Beiro. "Veo el futuro muy complicado. Los clubes vivimos del sector público y del privado y ambos se van a ver muy afectados con esto", reflexiona el presidente, que, no obstante, informa de que sus patrocinadores le han trasladado "una tranquilidad absoluta" para lo que viene. "Se están portando de diez", añade.
5 Gustavo Falque (Coruxo)
Como sus homólogos, el primer directivo del equipo verde lleva el confinamiento con resignación personal y con preocupación grupal. "Estar al cargo de tantas personas te hace tener un sentido de la responsabilidad muy grande sobre las decisiones que tenemos que tomar", apunta Falque, consciente de que hay que seguir "las directrices que nos están marcando" las autoridades. "Es la forma de que seamos todos juntos capaces de pasar lo mejor posible esta epidemia", apunta. " La primera semana se llevó bastante bien porque había cosas pendientes que hacer de oficina y siempre estabas ocupado. Con el paso de los días se lleva peor, pero hay que encontrar rutinas", concluye el presidente del Coruxo.
6 José Manuel Lobera (Tirán)
En plena temporada de bateles, el presidente de Tirán paró "desde el primer momento" las actividades de las categorías inferiores, que cuentan con 65 niños y niñas. Con el parón definitivo, el club moañés repartió sus ergómetros entre sus deportistas para que lleven el confinamiento en sus domicilios de la mejor manera posible. "Lo más importante es la salud. A partir de ahí, sí, es un fastidio a nivel deportivo, pero es algo que queda en un segundo plano. No nos supone muchos quebraderos de cabeza", destaca Lobera, que espera que la Federación de Remo tome medidas para el regreso de la competición. "Como no sabemos cuánto se va a alargar esto no sabemos qué medidas se pueden tomar, pero por lo menos tener contemplados algunos escenarios", concluye.
7 Mario Muzas (FG Judo)
El máximo mandatario del judo en Galicia pasa estas semanas "con las dudas normales, sobre todo en cuanto a la duración" de esta situación de confinamiento por la pandemia del Covid-19. "Nos ha descargado de presión el aplazamiento de los Juegos, que nos tenía agobiados, porque tenemos ahí a seis o siete deportistas inmersos en la lucha por la clasificación", reconoce Muzas, acostumbrado a estar fuera de casa. "Al principio, hasta sirve para desconectar y desestresar, pero según van pasando los días, se complica", confiesa el dirigente, que está "en contacto" con los deportistas y con los profesores. "Es duro para todos", finaliza.
8 Xosé Mosquera (FG Tenis)
"Aquí estamos, gardadiños", comenta con su guasa habitual el mandamás del tenis gallego. "O noso papel é axudar a non propagar o virus e ser solidarios con quen o precise", enfatiza el dirigente. En ese sentido, Mosquera ensalza la importancia de la escuela federativa que hay en Samil, así como su compromiso de protección con sus monitores, adelantándose al permiso retribuido recuperable que anunció el gobierno el pasado sábado. "Percibirán o mes de marzo íntegro co compromiso de que cando todo isto remate impartirán as clases perdidas", explica el presidente, que llegó a un acuerdo con los trabajadores para que se tomen la primera semana de abril de vacaciones y, si el Estado de Alarma finaliza en el tiempo anunciado, evitar solicitar un ERTE. "E que hai que facer un esforzo para protexer ós traballadores", proclama el directivo ourensano, que se muestra cariñoso con los deportistas, sin competición hasta junio por el parón decretado por la ITF. "Están obrigados a estar paradiños, quietos", comenta Mosquera. "Para cando volte a normalidade, trataremos de manter os torneos previstos", finaliza el presidente.
9 Diego Piña (Kayak Tudense)
La responsabilidad de estar a cargo de tantas personas está muy por encima de la incomodidad personal para Diego Piña. "Esto es como en una familia: te preocupa que el hermano pequeño pueda ir al cole, que el mayor haga la selectividad y que los padres mantengan sus puestos de trabajo", explica con una clarificadora metáfora el presidente del Tudense la situación para su base, para sus primeros espadas y para la viabilidad económica del club. "Piensas mucho en cómo estarán los chicos porque también son mi familia", confiesa para terminar.n
