celta

Más bajo ya no se puede caer

Iago Aspas se lamenta durante el partido de hace dos jornadas ante el Elche. El moañés, con goles y juego, sí está dando la talla.
photo_camera Iago Aspas se lamenta durante el partido de hace dos jornadas ante el Elche. El moañés, con goles y juego, sí está dando la talla.
El Celta es colista de Primera más de cuatro años después tras dos meses sin una victoria y con sólo tres puntos

Lo único bueno es que, desde donde está el Celta, sólo se puede mirar hacia arriba. Porque hacia abajo sólo hay abismo. La derrota del equipo vigués el pasado sábado ante el Sevilla (4-2) y los resultados de sus rivales directos, culminados con la victoria de ayer del Valladolid al Granada, lo han llevado a la última posición de la tabla. Un puesto que impresiona, aunque realmente los célticos están empatados a 7 puntos con sus dos predecesores, Huesca y Levante –este con un partido menos–, y tiene la permanencia a dos, con Valladolid y Athletic –también con dos encuentros menos, uno a disputar hoy mismo–. Cuando se llevan 10 jornadas, la situación no es desesperada porque faltan 28, pero  marca lo horrendo del arranque liguero. Y ya se ha tomado la decisión más drástica justo antes, la del cambio de entrenador. Eduardo Coudet ya sabe de dónde parte.
El Celta no se veía en una situación tal en lo clasificatorio desde el mes de septiembre de 2016, cuando un pésimo arranque con tres derrotas consecutivas dejaba a los pupilos de Eduardo Berizzo últimos tras la tercera jornada. De aquella, en la temporada de las semifinales de Copa del Rey y Liga Europa, fue sólo un paso fugaz. Mucho más contumaz fue la insistencia de estar vigésimo en los meses de abril y mayo de 2013, en el curso del retorno a Primera. Por entonces, el equipo vigués fue colista en las jornadas 31, 35 y 36, logrando al final una milagrosa salvación.

Ocho partidos sin ganar
Lo cierto es que la caída a la última plaza no es ni mucho menos una sorpresa para un equipo peleado con las victorias. Los célticos no ganan desde hace más de dos meses, concretamente desde que lo hicieron el pasado 19 de septiembre en Balaídos ante el Valencia, en el único triunfo que atesoran por el momento. Desde entonces, ocho partidos (tres en casa y cinco fuera) con un escaso balance de tres empates (Valladolid, Levante y Elche, todos a domicilio y todos por 1-1) y cinco derrotas. Siendo estas últimas cada vez más contundentes en goles.
De hecho, es ese balance goleador de -11, con 19 tantos encajados, lo que provoca que el Celta pierda en el empate con Huesca y Levante. El puesto de colista está bien merecido. A ver si la reacción.n 

Te puede interesar