El Celta cuenta con él pero si finalmente decide el fichaje de otro portero, el canterano podría buscar otro destino
Pese al mal sabor de boca colectivo, el portero céltico Iván Villar pudo cerrar la temporada recién acabada con una media sonrisa interna. No en vano, le tocó la complicada labor de defender la portería las tres últimas jornadas, con el equipo defenestrado de los nervios y la amenaza del descenso muy encima. Una de esas situaciones que curten y que, en un puesto tan delicado, pueden dejar señalado a cualquiera. Sin embargo, el de Aldán dio un paso adelante y en alguno de esos encuentros, concretamente el de Pamplona, tuvo una actuación destacada.
Esos tres partidos para un guardameta que no había logrado salir de la sombra de Rubén Blanco y Sergio Álvarez deben ser importantes. La cuestión es que el Celta, que contaba en el Aldán para el relevo generacional en una demarcación ocupada sólo por canteranos en los últimos años, decidió renovar una campaña más al de Catoria. Un movimiento que parecía dejar fuera de juego a Villar, que acumula tres campañas siendo el tercer portero –el del medio, defendiendo la portería del filial–. Pero las lesiones los dos metas que tiene por delante le abrió la puerta en la recta final de Liga y podría mantenerse así en el arranque de la próxima.
Las cuestiones a valorar son muchas. El propio club reconoce serias dudas a la hora de valorar si acude al mercado a reforzar la posición o se contenta con el trío del pasado curso más la ayuda de los porteros del segundo equipo. Y esas dudas se trasladan, lógicamente, a Iván Villar, quien espera también para clarificar su futuro.
Desde el entorno del jugador se insiste en la tranquilidad como principal argumento. Sobre todo, porque falta una última llamada desde el club que aclare las cosas. En Príncipe se asegura que se cuenta el canterano, pero también se entiende que la llegada de otro guardameta no sería lo mejor para su proyección.
Y tranquilidad también en el entorno de Villar porque, aunque este verano es muy extraño, el mercado todavía está en pañales, con categorías en juego y mucho por decidir. Se espera que el movimiento sea menor, por lo que habrá que esperar para que salte la espoleta y todo empiece a moverse.
Mientras tanto, Villar seguirá esperando a que el Celta le comunique la decisión tomada tras esa esperada última reunión entre el director deportivo, Felipe Miñambres, y el entrenador, Óscar García Junyent. Sobre la mesa, un tema clave: la portería.n
Esos tres partidos para un guardameta que no había logrado salir de la sombra de Rubén Blanco y Sergio Álvarez deben ser importantes. La cuestión es que el Celta, que contaba en el Aldán para el relevo generacional en una demarcación ocupada sólo por canteranos en los últimos años, decidió renovar una campaña más al de Catoria. Un movimiento que parecía dejar fuera de juego a Villar, que acumula tres campañas siendo el tercer portero –el del medio, defendiendo la portería del filial–. Pero las lesiones los dos metas que tiene por delante le abrió la puerta en la recta final de Liga y podría mantenerse así en el arranque de la próxima.
Las cuestiones a valorar son muchas. El propio club reconoce serias dudas a la hora de valorar si acude al mercado a reforzar la posición o se contenta con el trío del pasado curso más la ayuda de los porteros del segundo equipo. Y esas dudas se trasladan, lógicamente, a Iván Villar, quien espera también para clarificar su futuro.
Desde el entorno del jugador se insiste en la tranquilidad como principal argumento. Sobre todo, porque falta una última llamada desde el club que aclare las cosas. En Príncipe se asegura que se cuenta el canterano, pero también se entiende que la llegada de otro guardameta no sería lo mejor para su proyección.
Y tranquilidad también en el entorno de Villar porque, aunque este verano es muy extraño, el mercado todavía está en pañales, con categorías en juego y mucho por decidir. Se espera que el movimiento sea menor, por lo que habrá que esperar para que salte la espoleta y todo empiece a moverse.
Mientras tanto, Villar seguirá esperando a que el Celta le comunique la decisión tomada tras esa esperada última reunión entre el director deportivo, Felipe Miñambres, y el entrenador, Óscar García Junyent. Sobre la mesa, un tema clave: la portería.n
