En su primera temporada a cargo del Club de Béisbol Los Trasnos, Andrés Espinoza (Caracas, 21 de febrero de 1965) ha conseguido el campeonato de liga del grupo noroeste de Primera Nacional a falta de dos jornadas y sin ceder un solo partido.
El experimentado entrenador venezolano afronta la fase de ascenso con mucha ilusión y todavía con la incógnita de si tendrán a su disposición un campo de béisbol en Vigo, pues el Trasnos juega sus partidos como local en La Morgal, Oviedo.
¿Cómo fue su andadura a través del mundo del béisbol?
Empezó desde niño. Destaqué en el deporte venezolano y llegué a participar en competiciones internacionales. Desde los 16 años participé en el béisbol de Estados Unidos, jugué con los Metz de Nueva York y los Angelinos de Anaheim entre otros. Ascendí de Doble A a Triple A y no pude llegar a la cumbre de la Major League Baseball, pero me quedé cerca. Luego me fui a jugar y entrenar a Italia durante unos quince años, y este último decidí probar esta experiencia en el béisbol español.
¿Cuándo aparece esa oportunidad de ir a Estados Unidos?
Fue representando a mi país, Venezuela, en categoría juvenil. Tenía 15 años, destaqué y un cazatalentos americano me ofreció la oportunidad de firmar con un club de en Estados Unidos. A mis padres les pareció bien y accedieron a ello.
¿Fue muy duro el cambio?
Sí, por supuesto. Además tenía muy poca experiencia. En aquella época apenas tenía 16 años y la lucha del idioma fue dura, tenía de base solamente el inglés del colegio. Es totalmente distinto enfrentarte a otro país y otra cultura a tan poca edad. Pero con el amor al béisbol, seguí entrenando duro y lo superé.
¿Por qué decidió pasar a entrenar una vez terminada su carrera?
Cuando ya estaba en Italia, con el equipo de la República de San Marino, me empezaron a llamar la atención los equipos de las ligas menores que estaban allí cuando iba a entrenar. Los técnicos me decían que les enseñara algunas de mis técnicas a los muchachos pequeñitos que estaban allí y me llamaba mucho la atención. Entonces, cuando terminé mi carrera me ofrecieron seguir en el equipo como técnico entrenando a los pequeños.
¿Cómo fue esa primera experiencia entrenando a los jóvenes de San Marino?
¡Fue muy bonita! Resulta muy satisfactorio ver a los pequeñines cuando les vas enseñando y van aprendiendo, y cuando los ves jugar y ya sepan más o menos las cosas. Es muy bonito.
Después de esa experiencia por Italia, ¿cómo surgió la oportunidad de venir a Vigo?
Fue por una cuestión familiar. Mi esposa tiene tres hermanas que viven en Galicia, dos de ellas aquí en Pontevedra, así que decidí probar en el béisbol español. Me puse en contacto con la directiva de Trasnos, hablé con el coordinador general y les dije sobre la posibilidad de entrenar al club. Al final llegamos a un acuerdo.
A falta de disputar la fase de ascenso, ¿cómo califica esta primera temporada suya al frente de Los Trasnos?
Muy positiva, ya que tenemos un buen talento, material joven que está dispuesto a trabajar y hacer las cosas con mucho sacrificio y al club Trasnos que pone todo su empeño para que las cosas salgan bien. Todo eso de la mano traen estos resultados positivos que han sido un éxito en esta primera fase.
¿Cómo lleva el equipo tener que jugar en Oviedo a pesar de entrenar en Vigo?
Es la primera vez que me sucede una cosa así porque regularmente los equipos tienen su casa y luego juegan fuera. Nosotros llevamos todo el campeonato jugando como visitante, y no precisamente cerca. Son cinco horas de bus cada fin de semana, bien sea para jugar como local o como visitante. Es difícil no tener un campo y además en los entrenamientos hay que tener imaginación para hacer los ejercicios al no disponer de una instalación adecuada para trabajar y mejorar las cosas.
¿Hay algún plan para desbloquear la situación del campo, sobre todo en caso de ascender?
La organización Trasnos está haciendo todas las diligencias a nivel burocrático para que les concedan un área deportiva apta para esta organización, que en toda Galicia y España es considerada un club solvente y fuerte dentro del béisbol. Y no solo eso, muy pocos clubes en España cuentan con un material juvenil como Trasnos.
¿Cómo afrontáis la fase de ascenso?
Somos muy optimistas con lo que hemos hecho hasta ahora. Tenemos informes de los clubes con los que nos enfrentaremos en la fase de ascenso y estamos muy a la par de ellos. Tenemos mucha esperanza en que lo podremos lograr, y continuamos trabajando muy fuertemente para ello. n
