El auditorio de Mapfre en Vigo albergó ayer una multitudinaria presentación de la Vigo Copa de España de ciclismo, que se celebra el domingo con salida y llegada en la ciudad y un largo y duro recorrido por el área metropolitana. La cita mantiene el trazado de 2022, que pasa por ser el más exigente de todo el certamen estatal porque alcanza los 180 kilómetros y se eleva a 4.000 metros de desnivel positivo. Números propios de una etapa de montaña en una vuelta de tres semanas.
Todo ello, a pesar de que en los alrededores de Vigo no hay ascensos especialmente largos, pero sí se acumulan los pequeños y los ciclistas deberán afrontar A Groba, Monte Alba, Galiñeiro, Monte Aloia, Fonte dos 100 anos (Xunqueiras) y A Madroa. En 2022 llegó un grupo reducido a Chapela y en la subida final se impuso Alejandro Franco, que en la actualidad milita en el Burgos BH del pelotón profesional.
La representación autonómica será extensa con la totalidad de los conjuntos de Galicia en la salida y con un papel destacado del Vigo Rías Baixas, el conjunto organizador. Asier González encabeza una escuadra en la que también intentarán brillar Pablo Ara o Pelayo Díaz. El Supermercados Froiz y el Cortizo también son equipos punteros, mientras que intentarán dejarse ver el Oiense Escuela Estévez, Lasal Cociñas Louriña, Gsport, Retelec y Club Ciclista Vigués.
En todo caso, la dureza del trazado y el alto nivel complica a los conjuntos más humildes brillar en el cierre de un certamen que lidera el uruguayo del Caja Rural amateur Thomas Silva, que puede llegar a la salida en Praza do Rei (9:45) con el título resuelto, en función de lo que suceda mañana en la Rutas Xacobeas de Padrón. Además del conjunto navarro destaca el filial del Eolo Kometa y el Finisher, que es la escuadra amateur del Kern Pharma profesional.
El final está previsto en A Madroa -puerta de Vigozoo- sobre las 15:00 horas.
