BALONMANO

Un éxito de 30.000 euros

Adrián Carrera, del Porriño cadete, celebra un gol.
photo_camera Adrián Carrera, del Porriño cadete, celebra un gol.

La clasificación de tres equipos de cantera para la fase final del Campeonato de España elevó los gastos del Porriño hasta descuadrar el presupuesto de la presente temporada

Un éxito deportivo rotundo y un incremento del gasto inesperado y cuantioso, de unos 30.000 euros. El Balonmano Porriño encadena en las últimas semanas alegrías deportivas con sus equipos de las categorías inferiores al clasificarse tres de ellos para la fase final del Campeonato de España. Un éxito sin precedentes en la historia del club. Y, como hecho extraordinario, también lo son sus gastos, que resultan especialmente elevados y no estaban previstos.

La entidad ya contaba con que la formación juvenil femenina, con un gran potencial, pudiera alcanzar la fase final y así lo hizo. Incluso peleó por el título para finalizar en la tercera posición. Un éxito notable y con un coste que rozó los 15.00 euros. 

El rendimiento de la categoría cadete ya no estaba en los planes del club. Sí sabían en la entidad que disponían de escuadras fuertes, pero no hasta el punto de que ambas pudieran alcanzar la fase final del torneo que comienza hoy. El equipo femenino finalizó segundo en Galicia y viajó a Canarias -con el consiguiente gasto- para disputar el primer sector estatal. Y, contra pronóstico, ganó su grupo y se metió en la fase final que disputa en Elche. Dos viajes largos con estancia. Más de 18.000 euros. 

Una historia paralela vive la formación masculina pero, en su caso, siendo el Porriño el anfitrión del sector inicial y también de la fase final, que comienza hoy. En este caso, el club se ahorró los gastos de viaje y alojamiento, pero tuvo que abonar el canon por ser organizador. 4.500 euros de la primera fase y hasta 7.000 de la segunda. Un total de casi 11.500 euros. En un año normal, ser anfitrión conlleva el beneficio de hacer actividades paralelas que merman estos gastos y que gozan de éxito, como montar una cantina en el exterior del pabellón para dar servicio a los conjuntos foráneos con sus familiares y aficionados. Pero esta situación no es posible por la pandemia del covid. El club sólo ingresa las entradras de un pabellón que, además, dispone de un aforo reducido. De hecho, para el torneo que comienza hoy agotó las localidades. 

Los jugadores buscarán la victoria en la pista y la directiva que encabeza Abel Estévez podrá observar cómo avanza su proyecto de cantera con deportistas de un notable nivel que, en poco tiempo, llegarán al primer equipo. Eso sí, el mimo a las categorías inferiores conlleva un precio y en el exitoso curso presente con 30.000 euros más de los previsto. Tras disfrutar de los jugadores en la pista, el equipo de dirección deberá intentar compensar estos números fuera de ella. La cantera es básica pero conlleva un mantenimiento que puede ser costoso.

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