El Lavadores recupera el partido ante al Zonzamas (20:00) y la victoria lo sitúa primero
Un partido con el liderato en juego y lo que sería poner pie y tres cuartos en la promoción de ascenso a División de Honor. El CdeC Lavadores recibe esta tarde en su pabellón al Lanzarote Zonzamas, en un encuentro aplazado correspondiente a la décimo cuarta jornada en la segunda categoría del balonmano femenino español.
A la cita, el equipo de Anxo Otero 'Panchi' llega en la segunda posición de su grupo con un punto menos que el Rodríguez Cleba, de forma que el triunfo le otorga la primera plaza a falta de dos jornadas. Además, las cuentas establecen que, en caso de ganar esta tarde, un triunfo más ya le garantizaría estar entre los dos mejores porque el equipo leonés y el Oviedo, tercero, se enfrentan en el último encuentro.
Una situación que no se podían imaginar en el equipo vigués, un recién ascendido a la categoría, pero que desde el inicio de campaña mostró un extraordinario nivel, especialmente en el rendimiento defensivo gracias a una defensa dura y a la prestación de Irene Sánchez, con experiencia en División de Honor en Guardés, Porriño y Castellón. La cancerbera grovense explica que "conocía al entrenador Panchi (Anxo Otero) y yo le dije que firmaba, pero para jugar la fase de ascenso. Se rió porque era un equipo recién ascendido. Estamos dando la sorpresa". La portera, medio en serio medio en broma, "indica que soy ambiciosa y salgo a por todo. Tenía ganas de cambiar porque venía de jugar en División de Honor y con el objetivo de no descender, pero quería tener otras metas". No obstante, reconoce que la situación era poco probable y que las jugadoras estamos "un poco descolocadas. Motivadas, pero un poco sin creerlo. Competimos bien y ya no queda nada, tres partidos. Después de una temporada de diez, tenemos que exprimirlo al máximo. Estamos contentas y con ganas de más".
Irene Sánchez explica que gran parte del éxito de la campaña viene porque "hacía tiempo que no lo pasaba tan bien en la pista y fuera de ella. Tenemos un buen equipo y un buen vestuario y eso es algo que ayuda". De hecho, la formación viguesa es la menos goleada de todo el balonmano de categoría nacional en España al encajar únicamente 19.17 goles por encuentro. Una cantidad extremadamente baja, ya que ninguna otra formación recibe menos de veinte entre Asobal, División Honor Plata y Primera Estatal en hombres, ni en División de Honor de mujeres.
"También es una motivación. No sabía cómo estábamos de goles, pero sí, es posible", expresa Irene Sánchez y añade que "en esta liga sí que noto que los marcadores son más pequeños, pero me gusta. Tengo que defender bien mi puesto".
Un rendimiento que ya se plasmó desde los primeros partidos y la portera expresa que "estoy muy cómoda. Al principio costó entenderse y si hay algún problema lo digo y se habla. Desde el primer momento fue así y en este equipo estoy feliz, muy feliz".
Además del proyecto deportivo, la grovense recaló en el Lavadores porque conocía a gran parte de su plantilla de coincidir con ellas en torneos, selecciones autonómicas y otros equipos. Una cercanía que aumentó con el paso de las jornadas hasta el punto que "este verano jugaré en balonmano playa. Hace mucho que no lo hago, desde que me lesioné la rodilla. Al estar con ellas, con las del Bunga, me entraron ganas y volveré a la arena".
Eso sí, será después de intentar culminar una campaña de notable nivel y, si es posible, culminarla con un ascenso bajo las ordenes de Anxo Otero y también la medallista olímpica Begoña Fernández. "Aporta y ayuda en todo. Sólo cómo explica las cosas es un plus para el equipo. Mete caña, pero es algo que a mí me gusta", admite Irene Sánchez.n
