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El descanso separó el sueño de la pesadilla

Ángela Coello (número 18) regresó ayer al Celta Zorka Recalvi después de tres años y medio en Estados Unidos en un partido en el que Richardson                                           (dorsal 25), con 13 puntos, fue la máxima anotadora del equipo vigués.
photo_camera Ángela Coello (número 18) regresó ayer al Celta Zorka Recalvi después de tres años y medio en Estados Unidos en un partido en el que Richardson (dorsal 25), con 13 puntos, fue la máxima anotadora del equipo vigués.
El Celta Zorka Recalvi superó durante veinte minutos al Ensino de Liga Femenina 1, pero ofreció su peor versión                             tras el intermedio en el Memorial Paco Araújo

No hay amistoso permitido cuando en el cartel figura el nombre de Paco Araújo. Tras el correspondiente minuto de silencio, con un pabellón con menos espectadores de los que merecería cualquier partido en memoria del histórico presidente, las gradas adquirieron color, pero los rezagados se perdieron una versión del Celta Zorka Recalvi notable y, sobre todo, comprometida. Las jugadoras de Cristina Cantero saltaron a la pista de Navia con dos puntos de intensidad por encima de su oponente. Defendieron de forma agresiva con ayudas y atacaron con velocidad y acierto y una máxima deportiva que no siempre se cumple pero acostumbra a ser decisiva, que decida la mejor atacante. Richardson anotó en su los primeros ataques y con el 9-2 llegó el tiempo muerto del visitante Carlos Cantero. Respondió Celia García con un lanzamiento de tres puntos para establecer la máxima ventaja viguesa durante toda la primera mitad (13-2). 
Parar el partido, con los gritos de “mierda, mierda y defensa”, no tuvo efecto, y el Ensino comenzó con las rotaciones para cambiar la dinámica del encuentro. Lo consiguió con los cambios y también debido a que las célticas se vieron obligadas a introducir en el campo a la segunda unidad porque la primera ya estaba sin aliento. El trabajo defensivo continuó siendo bueno, especialmente en la pintura, pero la formación lucense anotó más, en gran medida porque no lo podía hacer peor. También fueron minutos para comprobar que Ángela Coello regresó al equipo tras completar los estudios universitarios en Estados Unidos con una preparación física óptima, por lo que aportará desde el primer minuto liguero como lo hizo ayer. 
El segundo cuarto trascurrió con un menor ritmo local porque mantener el inicial se antojaba imposible. El Ensino anotó con mayor regularidad, especialmente con acciones en la pintura, en un partido en el que la rotación era constante. Se situó en dos ocasiones a cuatro puntos, pero las célticas gestionaron los ataques con mayor presión con acierto y mantuvieron una renta de seis puntos al descanso (34-28). 
Ahí se terminó el encuentro local. Tras el paso por los vestuarios, el Ensino sí salió a la pista con la mentalidad de que para ganar tenía que mostrar su nivel real de baloncesto y el Celta Zorka Recalvi pasó de ser un conjunto fiable, acertado y con buenas decisiones a convertirse en una formación que encadenó regalo tras regalo a su oponente. En el tercer cuarto se pudieron contar hasta cinco pérdidas de balón claramente evitables, alguna de ellas fue un pase al rival, que terminaron en canastas fáciles. Se pasó del 34-28 al 43-49 al final del tercer cuarto. El último fue igual.

Celta Zorka Recalvi (18+16+9+17): 
Senosiain (6), Lacorzana (5), Celia García (8), Richardson (13), Edeferioka (7) 
–cinco inicial–, Itziar Germán (2), Montero (12), Barneda (4), Coello (3). 
Durán Ensino (9+19+23+22):
Sandra Stanacev (3), Aliaga (15), Miller (10), Ainhoa López (8), Bea Sánchez (8) –cinco inicial–, Nyingifa (11), Richards (14), O'Dwyer (4), Maite Franco. 
Árbitros:
Lema, Iglesias y Piñeiro. Sin eliminadas. 
Incidencias:
Cuarto Memorial Paco Araújo de baloncesto disputado en el pabellón de Navia ante 300 espectadores. 

La Casa del Básket vivió un día poco propicio para el recuerdo

Prometía y se quedó en eso, en promesa. El ambiente en el Polideportivo de Navia falló. Lo mejor fue la interpretación del "Negra sombra" para empezar, el regreso de Ángela Coello -porque el retorno de canteranas siempre es bienvenido- o ver algunas caras conocidas de otras épocas fieles a la figura de Paco Araújo (Domingo Salinas, que fue preparador céltico, por ejemplo). También la presencia del actual presidente de la organización del Memorial Quino Salvo , Moncho Lago, acompañado por Julio Bernárdez, su antecesor y unido también de por vida a la historia del baloncesto femenino céltico como entrenador del equipo en los años 80. 
Y poco más. El club que preside Carlos Álvarez contó con respaldo político (el secretario xeral para o Deporte, José Ramón Lete, que se perdió la segunda parte; el edil de Deportes, Manel Fernández, y el diputado provincial Gorka Gómez), pero faltó la salsa de un ambiente de partido de competición, con la grada amodorrada como si estuviera de sesión de cine. Los esfuerzos del "speaker" por calentar el ambiente en la Casa del Básket, por ser Navia ahora el hogar del Club Deportivo Bosco y del Baloncesto Seis do Nadal, resultaron en vano. Ni cuando estaban por delante las de Cristina Cantero ni al situarse a rebufo, teniendo que remar contracorriente.
El Celta Zorka Recalvi, y más este año tan irregular, va a necesitar de su afición para colarse en la fase de ascenso. Tal vez no transmita la fortaleza de las dos temporadas anteriores, tal vez la alargada sombra de Raquel Carrera aún necesite más soluciones para poder contrarrestarla, tal vez...
Con semanas de competición por delante para mejorar prestaciones (Senosiain, Germán o Edeferioka, por citar tres jugadoras con mala tarde ante el Ensino), lo que no admite demora es la respuesta de la afición, esa que puede decantar una balanza, regalar una intensidad defensiva extra en momentos determinantes.
Desde ahora, la cuenta atrás ha comenzado. La primera fecha a considerar es el cierre del mercado de fichajes. El 28 de febrero está marcado por la FEB como el último día habilitado para contrataciones. Coello ha sido el primer refuerzo invernal con la salida de Tulonen y las bosquistas está a un solo triunfo de los puestos de la fase. La segunda, en abril: del 23 al 26 se jugará la fase de ascenso el objetivo para el que, por tercer año consecutivo, se ha construido este equipo. Y a nadie se le escapa que el Celta Zorka Recalvi querría jugarla en Navia. Pues este sábado, ante el Pozuelo, toca dar el primer paso. A equipo y a afición.n

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