Park, Rossi, Mor y Rafinha son el póker de jugadores llegados al Celta en la última semana de mercado veraniego
Todo el mundo espera mucho de la última semana de mercado. Quizás, demasiado. Con la tercera jornada en liza, y con la cuarta y la quinta todavía de por medio antes de que se cierre la ventana de traspasos el próximo día, los clubes vivirán días de estrés, tanto en decisiones como en acciones. El Celta afronta esta recta final con un par de salidas por definir –David Costas, Jorge Sáenz y, tal vez, David Juncá– y a la espera de poder cerrar un refuerzo para su ataque, aunque con la espada de Damocles del límite salarial sobre su cabeza, circunstancia que afecta a la práctica totalidad de equipos.
No es muy dada la entidad celeste a este tipo de operaciones de entrada sobre la bocina. Desde su último ascenso a Primera, allá por 2012, únicamente ha cerrado cuatro fichajes en la última semana del mercado de verano, un número bien reducido teniendo en cuenta la ingente cantidad de jugadores llegados al equipo en los últimos ocho años.
El coreano Park Chu Young cerró precisamente el mercado celeste ese primer verano de regreso a la élite. La operación de cesión desde el Arsenal inglés se cerró un 31 de agosto, justo un día antes del cierre. Cuatro años después, fue otro delantero, Giuseppe Rossi, el que tuvo en vilo al celtismo, aunque en su caso sólo hasta el 27 de agosto, cuatro días antes del tope. También llegó cedido.
Al siguiente verano, el de 2017, el último fichaje y estrella fue el de Emre Mor, esta vez traspasado. El danés firmó un 29 de agosto, apenas tres días antes de la fecha tope para realizar operaciones. Tres años después, ahora parece empezar a dar rendimiento.
Por último, el último día de mercado del verano pasado aterrizó en Vigo cedido desde el Barcelona Rafael Alcántara 'Rafinha'. El sueño de muchos celtistas es que la situación se repita en los próximos días. No será sencillo pero hasta el rabo todo es toro.n
No es muy dada la entidad celeste a este tipo de operaciones de entrada sobre la bocina. Desde su último ascenso a Primera, allá por 2012, únicamente ha cerrado cuatro fichajes en la última semana del mercado de verano, un número bien reducido teniendo en cuenta la ingente cantidad de jugadores llegados al equipo en los últimos ocho años.
El coreano Park Chu Young cerró precisamente el mercado celeste ese primer verano de regreso a la élite. La operación de cesión desde el Arsenal inglés se cerró un 31 de agosto, justo un día antes del cierre. Cuatro años después, fue otro delantero, Giuseppe Rossi, el que tuvo en vilo al celtismo, aunque en su caso sólo hasta el 27 de agosto, cuatro días antes del tope. También llegó cedido.
Al siguiente verano, el de 2017, el último fichaje y estrella fue el de Emre Mor, esta vez traspasado. El danés firmó un 29 de agosto, apenas tres días antes de la fecha tope para realizar operaciones. Tres años después, ahora parece empezar a dar rendimiento.
Por último, el último día de mercado del verano pasado aterrizó en Vigo cedido desde el Barcelona Rafael Alcántara 'Rafinha'. El sueño de muchos celtistas es que la situación se repita en los próximos días. No será sencillo pero hasta el rabo todo es toro.n
