MARIO COVELO. Nuevo presidente de la Federación Gallega de Golf

"La crisis afectó al golf gallego"

Mario Covelo (izquierda), posa junto a Daniel Fernández, anterior presidente de la Federación Gallega de Golf durante los últimos 12 años.
photo_camera Mario Covelo (izquierda), posa junto a Daniel Fernández, anterior presidente de la Federación Gallega de Golf durante los últimos 12 años.

Con una extensa trayectoria como directivo en el Aero Club de Vigo y la Federación Gallega de Golf, Mario Covelo (Vigo 1970) coge el testigo en la presidencia, elogiando la gestión de su antecesor, Daniel Fernández, y con el objetivo de fomentar el golf en las categorías inferiores, introduciendo este deporte en los colegios.

¿Cómo se siente tras ser elegido como nuevo presidente de la Federación Gallega de Golf?
Contento y con la responsabilidad lógica del nombramiento. Era un tema que ya llevaba en proceso desde principio de año. Ha sido un periodo largo: se presentó otra candidatura que finalmente se retiró del proceso electoral. Desde que se hizo efectiva la presidencia, estoy asumiendo el puesto con la preocupación y las ganas por intentar hacerlo lo mejor posible.

¿Cómo ve la situación actual del golf en Galicia?
Después de una época de crisis en la que ha habido una merma de licencias, en Galicia tenemos actualmente más de 11.000. En tiempos de crisis económicas el ocio sufre y el golf, especialmente. En Galicia sólo hay un campo municipal, el de Meis, y el resto son privados y pertenecen a sociedades deportivas. Esas entidades han sufrido una época dura, con pérdidas de socios, como en el Náutico, el Mercantil o en Vigo, el Aero Club. Han pasado momentos de mucha dificultad y eso afecta al golf en general. Ahora las cosas parece que vuelven a ir mejor, hay nuevas altas y se empiezan a hacer cosas reactivando la situación.

¿Cuáles son los próximos retos que se plantean?
Queremos fomentar el golf en los propios clubes gallegos, elaborando planes que puedan atraer a un mayor número de socios. Por presupuesto, somos la séptima federación de España y como pasa en el fútbol, ese presupuesto se traslada a los resultados. Nuestro promedio de selección está en esa línea, séptimos o sextos, generalmente. Hemos tenido algún éxito importante pero nuestro objetivo es que esta situación mejore. Hemos diseñado 'clinics' con los jugadores más pequeños para el fomento de este deporte y, a nivel deportivo, contamos con un programa de tecnificación para seguir avanzando. 
 

¿Desde la Federación van a trabajar por inculcar esta pasión por el golf entre los más jóvenes?
A través de la Federación Española nos vamos a acoger al programa de golf en los colegios para que entre como actividad extraescolar. Todos los jugadores que empiezan no suelen dejar de jugar. Los más jóvenes pueden tener etapas en las que juegan menos por los estudios, luego hay casos como el de Marta García Llorca, a la conozco de mi etapa en el Aero Club, que compagina los estudios universitarios con una brillante carrera en el golf. La exigencia de la formación académica obliga a muchos de estos chicos a dejar el deporte, aunque luego siempre vuelven. La mayoría de personas de mediana edad que juega al golf empezó cuando era pequeña. El golf te da algo que no te dan otros deportes. 
 

¿Qué cree que hace tan atractiva esta actividad?
A partir de los cuatro o cinco años se puede practicar y no tiene límite de edad. Tenemos una liga sénior con más de 100 jugadores a nivel Galicia con más de 60 años y que juegan habitualmente al golf. Es un deporte que te da la oportunidad de disfrutarlo toda tu vida. Es muy difícil que lo dejes, te engancha. Muchos semiprofesionales de otros deportes acaban jugando al golf porque te permite físicamente disfrutar durante mucho tiempo. Es el refugio perfecto para seguir compitiendo y disfrutar del deporte. 

¿Trabajarán en la creación de nuevos espacios óptimos para desarrollar el golf gallego?
En Galicia tenemos un problema con los campos por la necesidad de una gran extensión de terreno. Aquí no puedes hacer lo mismo que en Andalucía, donde hay miles de campos, por la dispersión de la población y el reparto de terrenos, que dificulta la compra para poder crear nuevos campos. Son apuestas que cuesta un poco realizar pero existen nuevos proyectos. Estamos en contacto con las Diputaciones y con la Consellería de Deportes y la de Turismo para promocionar Galicia como un 'destino golf'. Ahora estamos trabajando en una modalidad de golf que se llama “Pitch & Putt”, que se realiza en campos más cortos, sin necesidad de grandes dimensiones de terreno y que fomentan la iniciación en el deporte.

Cuenta con una larga trayectoria en juntas directivas y comités  ¿qué le motivó a implicarse tanto en este deporte?
Sin duda, la pasión. Mis hijos juegan al golf desde pequeños y al final te van metiendo. Siempre he tenido la idea de que este tipo de cosas necesitan de gente que trabaje y sea capaz de aplicar mejoras. Empecé en el Aero Club de Vigo y desde ahí fui yendo de un comité a otro, trabajando en lo que me pedían. Intento siempre hacer lo que está en mi mano. Es pasión y sacrificio, pero en mi caso no me cuesta echarle horas.

¿Ser el nuevo presidente es un resultado de su pasión o hay también algo de ambición?
El anterior presidente, Daniel Fernández, dejó el puesto porque ya había cubierto el máximo de mandatos y me pidió que me presentase. Lo hice más por una lealtad a él más que por interés. Mi objetivo es intentar ayudar durante el tiempo que sea y ser útil para el crecimiento de la Federación. Si alguien lo puede hacer mejor y tiene mejores ideas, siempre estaré encantado de cederle el puesto. Mi único  interés es que el golf vaya bien. 

¿Qué valoración hace de la labor de Daniel Fernández al frente de la Federación?
Es un referente. Me mostró su apoyo desde el primer momento y me enorgullece que él haya confiado en mí para que siga al frente de la Federación. Lo sigo manteniendo como un modelo a seguir. Daniel ha hecho una gestión al frente de la Federación impecable. Será difícil poder superar y seguro que le daré la lata más de lo que él se piensa para pedirle algún consejo. Espero poder llegar a estar a su altura algún día. n

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