Dos derrotas seguidas han colocado al Coruxo de nuevo en zona de peligro, a un punto de los puestos de descenso, por lo que esta tarde recibe al Guijuelo en O Vao con la necesidad de conseguir una victoria que ponga fin a esa pequeña mala racha y sea el comienzo de otra más positiva.
El partido del pasado fin de semana, en que cayó ante el Zamora (1-0), dejó otras secuelas en el equipo vigués de cara al encuentro de hoy. La primera, que el portero ucraniano Andriy Chekotun debutará en la portería por la sanción de Alberto Domínguez, que fue expulsado en ese último desplazamiento. Jacobo Montes tampoco podrá contar con Antonini, que vio la quinta amarilla, y en la enfermería sigue Mateo, al que se ha unido Youssef.
Así las cosas, los hermanos Montes tendrán que variar el once para enfrentarse a uno de sus exequipos y unos de los rivales más fuertes de la categoría, un Guijuelo que empezó la jornada segundo y que la semana pasada se impuso al Polvorín (1-0), lo que le permitió cerrar un pequeño bache de dos derrotas. “Es un equipo muy bien trabajado y que tiene muy clara su forma de jugar. Compiten muy bien, están cómodos con marcadores ajustados y reciben poco gol, así que nos va a tocar hacer un ejercicio de paciencia para localizar sus puntos débiles y, a partir de ahí, intentar hacerles daño”, explicó el técnico del Coruxo sobre el partido que espera esta tarde.
Con Chekotun en la portería, Lucas Fernández será probablemente el encargado de suplir a Antonini en el centro de la zaga, mientras que en ataque, Luismi será la referencia ofensiva ante la baja de Youssef. "Debemos dar continuidad a la segunda parte que jugamos en Zamora. No tuvimos el premio que merecimos, pero la única manera que tenemos de revertir la situación es competir como animales", indicó Jacobo Montes.
