La presencia en la nueva segunda categoría del fútbol femenino, que con tanto esfuerzo se ganó el Matamá la temporada pasada, todavía no ha cristalizado en una realidad. La entidad celeste sigue apurando -el plazo de inscripción concluye el lunes- para encontrar un encaje económico que dé viabilidad al proyecto en el estreno de la Segunda División Pro.
De hecho, la directiva que preside César Casás mantiene gestiones a marchas forzadas que aseguren, no solo que el club vigués pueda salir en la nueva competición, sino que, además, pueda hacerlo con plenas garantías, tanto competitivas como, sobre todo, de viabilidad económica. En ese sentido, la búsqueda de un encaje jurídico en el nuevo marco competitivo continuará a lo largo del fin de semana, trabajando por una solución que permita al equipo que dirige Edu González competir en la categoría de plata con total tranquilidad.
Tras lograr que sus socios aprobasen la entrada en la competición nacional del equipo femenino, la directiva sigue trabajando para encontrar la manera de convertir ese derecho en realidad y sigue a la espera de apoyos institucionales y privados que faciliten la tarea.
