El batel masculino de Chapela se proclamó ayer subcampeón de España. Lo hizo en la localidad vizcaina de Sestao, en el marco del Campeonato estatal de esta especialidad de remo fijo. La plata de la tripulación chapeleira, por ser la única de categoría absoluta, fue la presea más destacada de la expedición de la Ría de Vigo, que regresó a casa con cuatro metales en el zurrón. Samertolameu de Meira se adjudicó el oro en infantil masculino y el bronce en juvenil masculino, prueba que conquistó Tirán para dejar claro que el futuro está garantizado.
El barco berete, tripulado por Aarón Alonso, Chema Pérez, Tomás Toscano y Juan Zunzunegui y patroneado por Sergio Fernández solo cedió ante otro gallego. Cabo da Cruz se proclamó campeón de España con cuatro segundo de renta sobre los chapeleiros. El tercer cajón del podio lo ocupó Zierbena, precisamente el exequipo del vigués Zunzunegui.
El dominio gallego se concretó en la Ría de Vigo en la prueba juvenil masculina. Tirán se llevó la victoria, con cinco segundos de renta sobre Kaiku y siete sobre su eterno rival, Samertolameu, que completó el podio y se adjudicó el bronce.
El club de Meira se colgó, además, otra presea. Y nada menos que de oro. El barco infantil masculino moañés se proclamó campeón de España al superar al Camargo por una exigua renta de poco más de un segundo. Puebla fue el tercero en discordia.
Además de las cuatro medallas, las embarcaciones del área firmaron buenas actuaciones. Es el caso del Robaleira guardés, cuya tripulación juvenil femenina se quedó a un paso del podio al concluir en cuarta posición su regata. Un sabor agridulce para las de A Guarda.
