Acumula 315 minutos, con tres partidos completos, sin marcar
Deporte local
Sergio completa el póker de debutantes
Desde que Iago Aspas se inventó una maravilla de gol justo antes del descanso del partido disputado en Valladolid, el Celta no ha vuelto a ver portería. Son ya 315 los minutos sin conocer las mieles realizadoras, que se sustancian en toda la segunda parte en Pucela y en los tres siguientes partidos ante Barcelona (0-3), Osasuna (2-0) y, ayer, Atlético de Madrid (0-2). En estos tres últimos encuentros, el parcial en contra del bloque celeste a nivel de marcador es un 7-0 que escuece.
No todos los encuentros sin gol han seguido el mismo guión. Los ha habido sin apenas llegadas a la portería rival y los ha habido, como el de ayer en Balaídos, con una decena y media de remates a portería, cinco de ellos entre los tres palos. No conseguir ni un solo tanto en cinco remates da cuenta de una falta de puntería preocupante.
Más cuando se constata que las tres dianas que por ahora atesora el equipo vigués son obra de un mismo futbolista, Iago Aspas. El moañés marcó los dos goles en la victoria ante el Valencia de la segunda jornada y también hizo el ya mentado en Valladolid. Su producción, para seis partidos, no está nada mal pero es obvio que la faceta realizadora no puede depender única y exclusivamente de un futbolista. Aunque sea el mejor de la plantilla.
Lo bueno de venir de dos campañas malas es que siempre se puede encontrar un dato peor cercano. En el pasado curso, entre las jornadas 25 y 30, el Celta se tiró 402 minutos sin marcar, incluyendo cuatro partidos completos. Y en la campaña 18/19, el récord fue de 413 minutos sin ver puerta, entre las jornadas 24 y 29, de nuevo con cuatro duelos completos sin gol. La primera de esas rachas se cortó con el 6-0 al Alavés; la segunda, con la decisiva victoria ante el Villarreal 3-2. Quien no se consuela es porque no quiere.n
No todos los encuentros sin gol han seguido el mismo guión. Los ha habido sin apenas llegadas a la portería rival y los ha habido, como el de ayer en Balaídos, con una decena y media de remates a portería, cinco de ellos entre los tres palos. No conseguir ni un solo tanto en cinco remates da cuenta de una falta de puntería preocupante.
Más cuando se constata que las tres dianas que por ahora atesora el equipo vigués son obra de un mismo futbolista, Iago Aspas. El moañés marcó los dos goles en la victoria ante el Valencia de la segunda jornada y también hizo el ya mentado en Valladolid. Su producción, para seis partidos, no está nada mal pero es obvio que la faceta realizadora no puede depender única y exclusivamente de un futbolista. Aunque sea el mejor de la plantilla.
Lo bueno de venir de dos campañas malas es que siempre se puede encontrar un dato peor cercano. En el pasado curso, entre las jornadas 25 y 30, el Celta se tiró 402 minutos sin marcar, incluyendo cuatro partidos completos. Y en la campaña 18/19, el récord fue de 413 minutos sin ver puerta, entre las jornadas 24 y 29, de nuevo con cuatro duelos completos sin gol. La primera de esas rachas se cortó con el 6-0 al Alavés; la segunda, con la decisiva victoria ante el Villarreal 3-2. Quien no se consuela es porque no quiere.n
