DIVISIÓN DE HONOR

Una bola de temporada

Anthía Espiñeira, con el balón, en un partido de la presente temporada.
photo_camera Anthía Espiñeira, con el balón, en un partido de la presente temporada.

El Porriño obtendrá la permanencia matemática si supera al Pereda en el Municipal  (17:00)

La primera bola de partido para la salvación. El Conservas Orbe Rubensa Porriño  recibe esta tarde al Pereda y, si logra el triunfo, obtendrá de forma matemática la permanencia en División de Honor porque también se enfrentan Morvedre y Cícar Lanzarote, que en la cuarta y quinta plaza marcan la salvación. El conjunto de Isma Martínez, que marcha primero con 15 puntos, tiene cuatro y cinco de renta sobre la formación madrileña y la canaria. Con el triunfo, obtendría, como mínimo, seis sobre alguna de las dos y, por lo tanto, la salvación porque los empates favorecen a las porriñesas. 

Más allá de los números, el equipo de Martínez transmite buenas sensaciones en el final de campaña. En el grupo de permanencia suma todos los partidos por victoria. De hecho, comenzó tercero y ya superó a Salud Tenerife y, sobre todo, a un Zuazo que parecía inalcanzable. Un rendimiento cimentado en un juego coral, pero con especial relevancia del sistema defensivo combinado con el rendimiento de la pareja de porteras formada por Fátima Ayelén y Estela Carrera. 

En ataque, la mejoría de forma de Anthía Espiñeira y de la zurda Erica Tavares también sirvió para incrementar el capítulo anotador y, con él, las victorias. Esta tarde, ante el Pereda, el equipo porriñés buscará mantener sus prestaciones con un ritmo de partido alto que permite hacer daño a un conjunto santanderino con calidad, pero un número limitado de jugadoras en la plantilla. Por ello, los partidos con desgaste acostumbra a pagarlos en el tramo final. “Es un equipo muy bien trabajado. Defensivamente son muy agresivas y fuertes y el partido del sábado pasa por adaptarnos a sus cambios de defensa. Está compensado y es completo”, asegura Martínez sobre su oponente de hoy. 

En el capítulo de bajas, el preparador continúa con la ausencia de Ana Rodrigues Cerqueira. Una ausencia que limita sus variantes defensivas y que obliga a jugar con las jóvenes Kaulback y Carme Castro en el extremo derecho. En todo caso, ambas mejoraron en el tramo final de curso. Por su parte, la primera línea Mónica Soares se recuperó de un esguince de tobillo producido en los partidos con la selección portuguesa. Volverá a ser una pieza clave.

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