El central mexicano se une a Tapia y Toro Fernández, que dejarán de ser extracomunitarios
Néstor Araujo ha iniciado los trámites para nacionalizarse español y este mismo año podría dejar de ocupar plaza de extracomunitario, lo que incrementaría las posibilidades del Celta para moverse en mercados distintos al europeo y, especialmente, en el latinoamericano. El central mexicano se une así al internacional peruano Renato Tapia, que hace ya un tiempo que empezó las gestiones para conseguir la nacionalidad holandesa, y al Toro Fernández, ahora cedido en el Zaragoza y que también pretende obtener el pasaporte español.
Para la consecución de la nacionalidad española por motivos de residencia, la normativa exige, con carácter general, una estancia legal continuada de diez años en el país. Sin embargo, este periodo se reduce a dos años en los casos de personas que procedan de países de Iberoamérica, además de Portugal, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial o de los sefardíes, sin que ello les haga renunciar a la nacionalidad de origen. De esta forma, en el caso de España, obtendrían la doble nacionalidad. Los jugadores procedentes de Iberoamérica representan la gran mayoría de este colectivo de extracomunitarios.
Es el caso de los tres futbolistas del Celta. El club vigués fichó a Néstor Araujo en el verano de 2018, por lo que el central mexicano ya ha cumplido los dos años de residencia en España.
Por su parte, el Toro Fernández fue presentado por el equipo celeste en el verano de 2019 y completará ese bienio el próximo verano, mientras que Renato Tapia aterrizó en los Países Bajos en 2013, pero las normas para nacionalizarse en aquel país son diferentes a las españolas.
En principio, ninguno de ellos obtendrá la nacionalidad que busca en el plazo del actual mercado de invierno, por lo que no podrán dejar libre ninguna plaza de extracomunitario en la plantilla del Celta, al menos hasta el mercado que se abrirá el próximo verano.
El club vigués pretende incorporar un delantero en esta ventana invernal, un fichaje complicado porque la dirección deportiva ya advirtió de que, para ello, tendría que producirse alguna salida. Concretamente, la de David Costas o Jorge Sáenz, los dos futbolistas con los que la entidad no cuenta desde el comienzo del curso. n
Para la consecución de la nacionalidad española por motivos de residencia, la normativa exige, con carácter general, una estancia legal continuada de diez años en el país. Sin embargo, este periodo se reduce a dos años en los casos de personas que procedan de países de Iberoamérica, además de Portugal, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial o de los sefardíes, sin que ello les haga renunciar a la nacionalidad de origen. De esta forma, en el caso de España, obtendrían la doble nacionalidad. Los jugadores procedentes de Iberoamérica representan la gran mayoría de este colectivo de extracomunitarios.
Es el caso de los tres futbolistas del Celta. El club vigués fichó a Néstor Araujo en el verano de 2018, por lo que el central mexicano ya ha cumplido los dos años de residencia en España.
Por su parte, el Toro Fernández fue presentado por el equipo celeste en el verano de 2019 y completará ese bienio el próximo verano, mientras que Renato Tapia aterrizó en los Países Bajos en 2013, pero las normas para nacionalizarse en aquel país son diferentes a las españolas.
En principio, ninguno de ellos obtendrá la nacionalidad que busca en el plazo del actual mercado de invierno, por lo que no podrán dejar libre ninguna plaza de extracomunitario en la plantilla del Celta, al menos hasta el mercado que se abrirá el próximo verano.
El club vigués pretende incorporar un delantero en esta ventana invernal, un fichaje complicado porque la dirección deportiva ya advirtió de que, para ello, tendría que producirse alguna salida. Concretamente, la de David Costas o Jorge Sáenz, los dos futbolistas con los que la entidad no cuenta desde el comienzo del curso. n
