El regatista vigués Alberto Viejo evoluciona de forma favorable del duro accidente sufrido el pasado sábado en aguas de la Ría de Vigo y por el que fue operado de urgencia en el Hospital Álvaro Cunqueiro tras sufrir una operación en la aorta, lo que le generó una hemorragia interna.
El deportista experimentó una evolución positiva en las últimas horas hasta el punto de comenzar a recibir alimentación líquida y admitirla el cuerpo de forma adecuada. Además, le fueron retirados algunos tubos que todavía tenía conectados, por lo que mantiene su proceso de recuperación sin contratiempos y a buen ritmo.
De hecho, en las últimas horas, Alberto Viejo ya tuvo la ocasión de hablar con sus allegados e intercambiar bromas. Mantiene el optimismo y ya piensa en las actividades que hacer tras superar su convalecencia en el hospital, que todavía se alargará debido a la gravedad de las heridas sufridas, especialmente en la arteria.
Desde su entorno apuntaban ayer que, para su supervivencia, resultó clave la temperatura del agua de 12 grados, que ralentizó la circulación y también el llevar encima un neopreno ajustado, que mitigó la proceso de hemorragia. Así se lo indicaron los galenos que atendieron al regatista tras el accidente sufrido el pasado sábado. Viejo, que es un consumado especialista de nivel mundial, sufrió una caída a bordo del barco de clase Swan 36 en el que entrenaba y se quedó debajo de la embarcación atrapado por el timón. En este proceso sufrió importantes golpes, pero el más severo y que puso en peligro su vida fue el que afectó a la arteria, una de las principales del cuerpo.
Tras el susto inicial, el navegante se recupera sin imprevistos y, como es habitual en este tipo de casos, es la mejor noticia posible. Eso sí, todavía deberá seguir un proceso de recuperación y con mucho reposo en los próximos días debido a la gravedad de las lesiones sufridas. Continúa en el centro hospitalario bajo supervisión médica.
Alberto Viejo es un deportista veterano y uno de los hombres de confianza de Pedro Campos y del rey emérito Juan Carlos I. En las últimas competiciones realizadas por el ya exmonarca en la clase 6 metros, el vigués era uno de los tripulantes del “Bribón”, que se proclamó campeón del mundo de la modalidad en 2019.
