ABRE LA FRONTERA

El territorio transfronterizo reclama ayudas y una tarjeta de residentes

Alcaldes del Miño cruzaron ayer el puente de Arbo para celebrar la reapertura de fronteras para paso de trabajadores.
photo_camera Alcaldes del Miño cruzaron ayer el puente de Arbo para celebrar la reapertura de fronteras para paso de trabajadores.
La apertura de todos los puentes del Miño mejora el paso de los trabajadores y el transporte de  mercancías  

 Los cierres que impedían el paso en el puente internacional de Salvaterra fueron cortados ayer poco antes de las 8 de la mañana para permitir el paso de los trabajadores transfronterizos y el transporte de mercancías después de tres meses cerrado. Esta apertura, que se repitió en los puentes de Goián y de Arbo, era una de las reivindicaciones de los alcaldes de los municipios de ambos lados del río, apoyados por la AECT Río Minho. El director de esta agrupación supramunicipal, el diputado provincial del BNG, Uxío Benítez, aseguró en el acto institucional celebrado en medio del puente de Arbo, a escasos metros de Portugal, que esta es "una victoria que, en todo caso, no va a solucionar todos los problemas que aquí tenemos", quien reclamó medidas de compensación por el daño económico a esta región transfronteriza durante el cierre de la mayoría de sus pasos. La apertura para el paso de todos los ciudadanos será el día 1 de julio.
 Benítez aprovechó su intervención para hacer dos nuevas reivindicaciones, ambas de gran calado para todo el territorio . Una, la creación de una tarjeta de residente en alguno de los municipios que integran esta franja transfronteriza y una segunda para contar con “medidas económicas compensatorias” para reactivar el territorio miñoto con fondos europeos, estatales y regionales". Recordó que la crisis económica que se está gestando será doble en este territorio por el cierre de la frontera, por lo que propuso que se instruyan los procedimientos económicos necesarios "para que se compense al territorio  porque nos impidieron relacionarnos comercial y económicamente con los vecinos de la lado”.  De hecho, dijo que en el próximo cuadro de fondos comunitarios  se haga una Inversión Territorial Integrada ( ITI) en el río Miño y se dediquen fondos a hacer una inversión enfocada en el territorio “porque entendemos que es un territorio con muchas posibilidades de desarrollo socioeconómico y hay que reactivarlo”. Sobre la tarjeta para los residentes  de estos municipios, este documento serviría tanto para garantizar el paso en cualquier circunstancia, como otro cierre de fronteras, como para el uso de servicios. 

Ganar calidad de vida y dejar de recorrer 200 kilómetros al día

nnn El alivio por la habilitación, aunque parcial y con restricciones, de tres nuevos pasos fronterizos tuvo protagonistas. Una de ellas era Cecilia Puga, vecina de Arbo con una peluquería en Melgaço, al que apenas tarda en llegar seis minutos en coche y que durante el cierre del puente tenía que recorrer todos los días  190 kilómetros y tardaba entre dos horas y dos horas y media por trayecto, si no más, ya que habitualmente se formaban colas en el puente internacional Tui-Valença, por el que transitaron alrededor de 8.000 vehículos cada día.
La apertura del paso en Melgaço supone para ella "calidad de vida" más que nada, pues su negocio ha tenido "muy poca actividad" y teme que tardará en recuperar el ritmo de antaño, si es que eso llega a suceder. "La gente en Portugal todavía tiene miedo. Los primeros días de apertura sí hubo algo de gente, por las raíces sin teñir y el pelo sin cortar" por tanto tiempo de confinamiento, pero "las clientas habituales de lavarse el pelo se perdieron", igual que las españolas que cruzaban la frontera. Otro de los beneficiarios por esta apertura parcial es Santiago Rodríguez, empresario de Valga que se dedica a la venta de accesorios de carpintería en el norte de Portugal. A partir de hoy se ahorrará entre 60 y 70 kilómetros de viaje. n  

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