La inauguración oficial será mañana sábado, con un recital nocturno de guitarra
El Parque Balneario “das Augas Féreas” abre mañana sus puertas como espacio natural, tras la firma de cesión gratuita del propietario al Concello de A Cañiza durante cuatro años. Así, mañana sábado, 8 de agosto, a las diez de la noche (22h), se inaugurará oficialmente con un recital de guitarra de los músicos Xosé Antonio Rodríguez y Antía Muíños.
A partir de mañana sábado, vecinos y visitantes podrán disfrutar de un lugar tranquilo, saludable para pasar una jornada familiar a menos de un kilómetro del centro urbano de A Cañiza, con una superficie de 15.500 metros cuadrados. Un nuevo parque donde disfrutar de un recorrido por el frondoso bosque autóctono a través de un sendero diseñado por el Concello, que también recuperó el manantial de “augas de beber” e instaló mobiliario. El parque cuenta con un edificio central de utilización pública (del antiguo balneario), donde organizar futuras exposiciones.
El parque se ubica en un terreno histórico con un pasado ligado a un balneario (1863), de aguas oligometálicas, medicinales, donde cientos de cañicenses acudían a tomar las augas “de beber”, con componentes activos de gran valor terapéutico principalmente por su acción diurética.
"A finales de Siglo XIX, un matrimonio de Tui compró los terrenos de Augas Férreas donde construyó un pequeño y coqueto Balneario con terrazas, cómodas bañeras blancas y paredes forradas de azulejos blancos y azules. Cuando falleció el marido, su viuda -sin descendencia-, empezó a tener problemas económicos que se fueron agravando por la competencia de otros dos balnearios cercanos recién abiertos, como Mondariz o Cortegada, por lo que, en los años 30 del siglo XX -Doña Pilar, más conocida como 'Crisanta'-, decidió cerrar su establecimiento e irse a vivir al hospedaje y Casa de Comidas 'La Palleira', en la calle Progreso de A Cañiza (frente a la plaza Mayor). Y ya mayor y sin descendencia, más tarde se trasladó a Tui, su ciudad natal".
Se dice que un tal Don Camilo, tomó las riendas del Balneario. Pero como fue pasando de un propietario a otro, aún hoy, los cañicenses no lo tienen claro.
A partir de mañana sábado, vecinos y visitantes podrán disfrutar de un lugar tranquilo, saludable para pasar una jornada familiar a menos de un kilómetro del centro urbano de A Cañiza, con una superficie de 15.500 metros cuadrados. Un nuevo parque donde disfrutar de un recorrido por el frondoso bosque autóctono a través de un sendero diseñado por el Concello, que también recuperó el manantial de “augas de beber” e instaló mobiliario. El parque cuenta con un edificio central de utilización pública (del antiguo balneario), donde organizar futuras exposiciones.
El parque se ubica en un terreno histórico con un pasado ligado a un balneario (1863), de aguas oligometálicas, medicinales, donde cientos de cañicenses acudían a tomar las augas “de beber”, con componentes activos de gran valor terapéutico principalmente por su acción diurética.
"A finales de Siglo XIX, un matrimonio de Tui compró los terrenos de Augas Férreas donde construyó un pequeño y coqueto Balneario con terrazas, cómodas bañeras blancas y paredes forradas de azulejos blancos y azules. Cuando falleció el marido, su viuda -sin descendencia-, empezó a tener problemas económicos que se fueron agravando por la competencia de otros dos balnearios cercanos recién abiertos, como Mondariz o Cortegada, por lo que, en los años 30 del siglo XX -Doña Pilar, más conocida como 'Crisanta'-, decidió cerrar su establecimiento e irse a vivir al hospedaje y Casa de Comidas 'La Palleira', en la calle Progreso de A Cañiza (frente a la plaza Mayor). Y ya mayor y sin descendencia, más tarde se trasladó a Tui, su ciudad natal".
Se dice que un tal Don Camilo, tomó las riendas del Balneario. Pero como fue pasando de un propietario a otro, aún hoy, los cañicenses no lo tienen claro.