La situación no era la más sencilla para Hugo Mallo. En plena lesión muscular (rotura fibrilar grado I en el bíceps femoral derecho), cuya recuperación no fue sencilla, llegó el cambio de entrenador. Y su ausencia también favoreció la irrupción positiva de Óscar Mingueza, que había empezado el curso con el mal fario del penalti ante el Espanyol pero que ya se había recuperado. Además, durante la pretemporada otoñal no pudo participar en ninguno de los tres amistosos programados al no disponer del alta médica.
Pero Mallo es titular. Lo ha sido prácticamente siempre. Y en cuanto pudo, Carlos Carvalhal le dio todos los galones, estando presente en el once titular ante Sevilla, Elche y Villarreal de forma consecutiva, perdiéndose únicamente los seis últimos minutos del primero de los duelos. La prueba fidedigna de que el técnico portugués lo considera clave se dio el pasado viernes, cuando a falta de media hora se decidió a apostar por una retaguardia de cuatro jugadores y sacó del campo a Mingueza y no al capitán.
No es baladí la cuestión, más en un momento en el que la continuidad de Mallo en el Celta, donde es una institución, no está asegurada. Con el contrato a punto de cerrarse y la competencia de Mingueza, que se une a la ya existente de Kevin Vázquez y la latente de Sergio Carreira, el marinense de 31 años veía peligrar su reinado de más de una década.
Porque Mallo ha reinado y reina en el lateral derecho celeste. 14 temporadas completas siendo el elegido no son moco de pavo. En los últimos dos cursos y medio, apenas comenzó en el banquillo un encuentro de Liga y fue el de la última jornada de la campaña 2020/2021 en casa contra el Getafe en el que el equipo no se jugaba nada y Eduardo Coudet quiso tener un gesto con Kevin Vázquez.
A lo largo de toda su carrera, ha disputado 384 partidos de Liga y únicamente no fue titular en 16. Y seis fueron en la primera campaña, allá por 2009/2010. Sólo ese curso y una década después, en el 2019/2020 (5), superó la cifra de un partido como suplente. Además, esta temporada parecía que podía convertirse en carne de sustitución, pero sus dos últimos choques de 90 minutos también han variado la tendencia.
Esa condición de perenne en la titularidad liguera la comparte Mallo con otros cuatro compañeros: Agustín Marchesín, Javi Galán, Joseph Aidoo y Unai Núñez. Es decir, la línea defensiva como sostén del equipo.
Mallo ha tenido también mano izquierda táctica para ser el céltico que mejor se ha amoldado a esa extraña función de lateral-extremo-carrilero que propugna Carvalhal. El protagonismo que antes tenía en la salida de balón y en los centros trata de adoptarlo ahora en la ocupación de espacios e, incluso, en la llegada al área. Ante el Villarreal, de hecho, fue el segundo céltico en remates con tres, sólo por detrás del prolífico Carles Pérez (5).
Sea como sea, el capitán juega. Ahora, no parece que vaya a perder su sitio, a la espera de alcanzar su mejor punto de forma. Mallo, titular.
Cuádruple empate a 17 puntos a la espera del Cádiz
La jornada ha ajustado mucho la clasificación en la zona baja, a la espera de lo que suceda esta noche en el duelo directo entre los dos últimos clasificados, Cádiz y Elche. Un triunfo del conjunto gaditano lo sacaría de plaza de descenso y metería en ella al Valladolid, uno de los cuatro equipos que se encuentran empatados a 17 puntos -1 por jornada-. Los otros tres son el Espanyol, al que le dio vida su victoria de ayer, el Getafe, precisamente el rival espanyolista, y el Celta.
Los cinco puntos sumados por los célticos en las tres jornadas tras el parón no les han servido para huir de la zona baja, pero sí al menos para cazar a varios que los precedían en la clasificación y hacer que el problema clasificatorio afecte a más protagonistas. Ese arreón celeste después del Mundial ha sido compartido con otros conjuntos como el Espanyol -también cinco puntos, de una victoria y dos empates- y el Cádiz -que ya lleva cuatro tras un triunfo y una igualada a la espera de lo que haga hoy-. Esa buena producción choca con el bajón de los rivales que estaban un peldaño por encima. Así, el Valladolid ha perdido sus tres últimos encuentros y el Getafe ha ganado uno pero ha caído también en los dos más recientes. De ahí que esos dos pisos que existían en el momento del parón se hayan igualado tanto que los gaditanos podrían saltar a todo este grupo de ganar hoy.
Por el momento, el Celta iguala los 17 puntos que tenía a estas alturas la pasada campaña. Aunque será complicado que cierre la primera vuelta con los 23 del anterior curso, ya que para ello tendría que ganar sus dos próximos partidos: Mallorca fuera y Athletic en Balaídos.
Con la parte baja estudiada, por encima sólo se encuentran a tiro el Almería (13º, 18 puntos) y el Valencia (12º, 19), aunque este último con un partido menos. Concretamente, el que jugará el próximo 2 de febrero en el Bernabéu ante el Real Madrid.
