La plantilla del Celta cerró ayer la semana de trabajo con un amistoso fantasma disputado en la ciudad deportiva de Mos ante el Famaliçao portugués, conjunto que ocupa la novena plaza de la máxima categoría lusa. Del duelo, no anunciado por ninguna de las dos entidades, no han trascendido detalles, más allá de que no fue un encuentro reglado. Sea como sea, el técnico celeste, Carlos Carvalhal, pudo comprobar de primera mano el estado de los jugadores de los que dispone, que son todos los de la primera plantilla salvo el lesionado Augusto Solari y los seis internacionales que están con sus selecciones: Iago Aspas, Renato Tapia, Joseph Aidoo, Luca de la Torre, Jorgen Strand Larsen y Williot Swedberg.
Las dudas principales se ciernen sobre el estado físico exacto de Óscar Mingueza y Gabri Veiga. El primero está en la recta final de la lesión en la parte anterior de su muslo derecho que le ha hecho perderse las cuatro últimas jornadas. Carvalhal espera poder contar con él ya ante el Almería y ayer seguro que pudo sacar conclusiones positivas al respecto. En cuanto a Veiga, el porriñés dejó la convocatoria de la selección española sub-21 por unas molestias en los isquiotibiales que invitaban a la precaución. En todo caso, es de esperar que el canterano pueda estar también este sábado para enfrentarse al Almería.
Es bien sabido el gusto de Carlos Carvalhal, entrenador del Celta, por los partidos como parte del entrenamiento. Y sus buenas relaciones con el fútbol portugués posibilitan encuentros como el de ayer en la ciudad deportiva de Mos.
Hoy, los jugadores disfrutarán de una jornada de descanso para retomar el trabajo ya mañana, a cinco días del próximo partido liguero. A lo largo de la semana se espera que se vayan incorporando los seis internacionales, con Luca de la Torre como el céltico con un viaje más largo. Franco Cervi puede tener su oportunidad.
