Cuentan los números que el Celta no pierde el tiempo. O, al menos, no lo ha hecho en demasía en las cuatro jornadas de Liga que ya se han disputado. Dentro de una competición que no se caracteriza precisamente por el cuidado del espectáculo en cuanto a tiempo de juego real dentro de los encuentros, el conjunto vigués es el sexto equipo de Primera que mejor promedio de minutos reales tiene, con un 55,1% de los mismos.
De hecho, la situación podía ser incluso mejor de no haber sido, curiosamente, por el duelo ante la Real Sociedad en Anoeta. Aquel partido fue el menos aprovechado de toda la jornada, con apenas el 48%, que procede de los sólo 49 minutos jugados de los 102 totales. Es decir, que más de la mitad del tiempo el balón no estuvo en juego, una paradoja cuando los vigueses se enfrentaban a uno de los rivales que más gusto tiene por la posesión y por el juego combinativo.
Ésa fue la excepción. En las otras tres jornadas, los célticos confirmaron que no son de perder tiempo, protagonizando en todas ellas el segundo encuentro de la jornada con más minutos reales de juego. Sucedió ante Osasuna, con 55 de 98 -ese fue el partido más corto globalmente de todos en ese fin de semana largo-, es decir, un 56%. Se repitió de nuevo en Balaídos con el Real Madrid enfrente, con 57 minutos de 102, lo que supone un 55,8%. Y de nuevo pasó en el último duelo, la victoria en casa del Almería, con 60 de 102, o sea, un 58,82%. El porcentaje más alto de los célticos desde que se inició la competición.
Siempre según los datos de la empresa de estadísticas Opta, el Celta es pues el sexto equipo de la Liga que más deja jugar con su 55,1%. Sólo lo superan el Real Madrid (58,3), Osasuna (56,4), Athletic (56), Las Palmas (55,5) y Betis (55,3). En el otro extremo están el Cádiz (46,7), el Alavés (47,4), el Sevilla (48,2) y el Mallorca (48,9), próximo rival celeste.
