baixo miño

Un millón de euros de la ONCE para un solo vecino de Goián

Roberto lleva siete años repartiendo suerte todos los días en Goián y en O Rosal.
photo_camera Roberto lleva siete años repartiendo suerte todos los días en Goián y en O Rosal.
Roberto González también vendió otros nueve cupones ganadores de mil euros cada uno
 La voz de Roberto González se emociona cuando habla del premio que repartió ayer en Goián. Este vendedor de la ONCE fue el encargado de vender el cupón premiado con un millón de euros en el sorteo del pasado miércoles y que se llevó una sola persona. Además, también dejó una alegría a otros nueve vecinos de esta parroquia de Tomiño que le compraron otros tantos cupones agraciados con mil euros cada uno.
Este vendedor, que lleva siete años repartiendo suerte e ilusión entre sus clientes de Goián y de O Rosal, estaba ayer emocionado tras encontrarse con el agraciado con el millón de euros, quien "me dio un gran abrazo", explica con la misma alegría que si hubiera sido él quien hubiese ganado el premio extraordinario de la Once.
Roberto, que fue albañil de profesión hasta los 35 años, vende en Goián desde julio de 2013 y asegura estar contentísimo con el premio repartido y con su nuevo trabajo que le permite "dar noticias positivas, máxime ahora que con esto del coronavirus la gente está más preocupada". 
Los cupones premiados fueron vendidos cuatro de ellos en una peluquería del centro de Goián, que cerró por vacaciones, por lo que Roberto repartió los restantes "en la calle entre la gente que me encontraba", por lo que no conoce a los agraciados con los premios de mil euros. La jornada de este vendedor de ilusiones le lleva a recorrer todos los días casi cien kilómetros para estar todos los días con sus clientes y hacer un trabajo que asegura "me gusta mucho, Ha sido una gran oportunidad para mí ya que como consecuencia de un accidente no podía seguir como albañil". Un día normal comienza siempre en las calles de Goián, ya que dice que le gusta caminar para ir al encuentro de sus clientes, que ya le conocen, y por la tarde sigue en O Rosal para regresar a su casa y hacer una nueva parada en Goián si queda algo por vender.  

Te puede interesar