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Buscan coordinar actuaciones en ambas márgenes del Miño

El río Miño es uno de los principales nexos de unión de la región transfronteriza y uno de los principales generadores de riqueza de toda la comarca.
photo_camera El río Miño es uno de los principales nexos de unión de la región transfronteriza y uno de los principales generadores de riqueza de toda la comarca.
Uxío Benítez propone eliminar las disparidades según la administración que intervenga

Las distintas y, a veces, opuestas maneras de tratar y actuar en el río Miño y sus márgenes por parte española y portuguesa, fueron cuestionadas por el AECT Río Minho, organización que quiere abordar con la Xunta y los gobiernos español y portugués con el fin de unificar los criterios de actuación y protección del río Miño en un Plan de Gestión Transfronterizo (PXT) común y coordinado. Para conseguir este objetivo, el AECT acaba de ver aprobada una nueva candidatura al programa B-Solutions de la Comisión Europea que permitirá que expertos asesores y consultores de la UE intervengan ante las administraciones y resuelvan los problemas jurídicos que en la práctica hacen que el río Miño sea tratado de dos maneras diferentes en el lado gallego y en el portugués.
Según explicó el diputado de Cooperación Transfronteriza y vicedirector del AECT, Uxío Benítez, el río Miño es un espacio de protección ecológica de ámbito europeo gracias a la “Rede Natura 2000” que se rige por una normativa europea única para todos los países miembros. Sin embargo, en el caso del Miño son varias las administraciones (gallega, española y portuguesa) que deben interpretar esa legislación europea de protección lo que, en la práctica, deriva en criterios diferentes que generan disfunciones por autorizaciones más o menos permisivas.
 “No se entiende la diferencia de criterios de protección entre una y otra orilla. Desde el AECT queremos una gestión justa y coordenada del espacio fluvial natural transfronterizo, donde las barreras políticas y administrativas nunca estén por encima del sentido común”, subraya Benítez.
El diputado recuerda que cualquier actuación de una margen repercute en la otra y que la disparidad actual de criterios está creando problemas ambientales y socioeconómicos. “Tenemos un espacio de gran valor identitario, con una protección máxima por su singularidad y que podemos desarrollar con el ecoturismo. El río es estratégico y hay que cuidarlo con criterios coordinados”.  

Un plan de gestión transfronterizo para todos

El AECT acaba de ver aprobado el proyecto “Minho River Nature 2000–  BoostingCross–Border Multi-level Governance- Natureza do río Minho 2000– Impulso da gobernanza multinivel transfronteiriza” que se presentó hace meses como candidatura del AECT Río Minho al programa B-Solutions de la Comisión Europea.
Con la aprobación de este proyecto la Comisión Europea (DG Regio) pondrá a disposición del AECT del Río Miño una persona experta para asesorar en el planteamiento de propuestas a las administraciones gallegas, españolas y portuguesas competentes y concurrente en el territorio del valle transfronterizo del río Miño con el fin de superar los obstáculos que actualmente impiden la planificación conjunta.
El Plan de Gestión Transfronteriza del Río Miño-Red Natura deberá conseguir objetivos a corto, medio y largo plazo, contando con la participación de entidades portuguesas y gallegas, desde la administración y el mundo académico hasta particulares y organizaciones de toma de decisiones, en forma de proyectos conjuntos que fomenten la conservación de los valores al tiempo que catalizan su valorización social y económica.
De este modo, se marca como tareas a corto plazo la constitución de un grupo de trabajo responsable de la preparación del PXT y la coordinación general de acciones y proyectos específicos; el desarrollo e implementación de planes de acción transfronterizos para hábitats y especies más vulnerables a las presiones ambientales actuales, emergentes o futuras; el desarrollo de cartografía detallada y armonizada de valores y unidades gestión en toda el área Natura 2000; y la adopción de objetivos comunes de gestión, la identificación de conflictos y harmonización de la normativa, principalmente.
También será importante asociar esta iniciativa con la estrategia regional del paisaje de Galicia y su relación con la estrategia del paisaje de Portugal, cuyo alcance y visión de mejora del paisaje son muy diferentes, dando lugar a oportunidades de replicar la estrategia gallega en el lado del val do Miño portugués.

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