El Celta B perdió con el Salmantino y se tendrá que jugar la permanencia en la promoción
Halloween a finales de mayo. Es la mascarada que le tocó padecer ayer al Celta B en Barreiro, donde traía una racha en la que, de los últimos quince puntos en juego, sumó trece. Mal número si no crece. Y no creció. Los pupilos de Rubén Albés fueron incapaces no ya de ganar al Salmantino, sino de tan siquiera arrancarle un empate que, en vistas de cómo se dio la jornada, tampoco habría servido para nada. De hecho, el filial céltico se ha visto abocado a disputar la promoción de descenso debido a un gol agónico en el minuto 86. Un tanto que no metió un jugador celeste ni uno charro. Una diana que, en realidad, se anotó a 600 kilómetros de Barreiro. En Boadilla del Monte. Fran Cortés logró perforar la portería del Guijuelo y d salvar de la quema a su equipo, el Inter de Madrid, para lanzar directamente a la hoguera al Celta B.
La fiesta comenzó a transformarse en coitus interruptus en el minuto 17. Asdrúbal anduvo más listo que la zaga local y cabeceó de espaldas y casi con los pies en el suelo una falta lateral que bajaba con nieve. El remate sorprendió a Iván Villar y enmudeció a Barreiro.
Pero la reacción fue inmediata. Como un pellizco para salir del letargo. Iban Salvador se echó el equipo a la espalda y comandó el arreón del Celta B. El ecuatoguineano vio cómo Carpio le quitaba un balón de gol debajo de los palos, poco antes de que asistiese a Bermejo, que fue derribado por el excéltico Sotres. Salvador ejecutó el penalti y no falló.
Todo volvía a empezar, pero el filial seguía en el puesto de promoción. El Inter ganaba al Guijuelo y el Atlético de Madrid B no podía con Las Palmas Atlético. Un gol en cualquiera de esos campos podía cambiar el decorado de Barreiro. Pero el escenario que mutó -y para mal- fue el del propio feudo celeste. Un gol de Calero tras un error en cadena de Salvador, Ros y Pampín torcía todavía más el renglón de la salvación local.
Y cuando uno no hace los deberes siempre se puede apelar a que otros lo hagan. Y así fue. Al menos por un momento. Raúl Ruiz empataba para el Guijuelo y salvaba al Celta B, totalmente bloqueado sobre el verde, con mucha presencia ofensiva en campo rival, pero pocas soluciones para cristalizarla en ocasiones claras.
Finalmente, el Inter sí que hizo lo suyo y dejó a los célticos solos ante el peligro. No hubo más milagros. Toca promocionar para salvarse. Dos semanas más para intentar mantener la categoría. Será a cara o cruz. A truco o trato.
Celta B:
Iván Villar; Carreira, Diego Alende, Ros, Diego Pampín (Dani Vega, min. 90); Álex Serrano, Rai (Dani Molina, min. 81), Bermejo, Alberto Solís (Pastrana, min.72); Iban Salvador y Manu Apeh.
Salmantino:
Sotres; Tyson, Carpio, Chiapas, Mena; 'Chatón' Enríquez, Sergio Molina; Iván Calero, Asdrúbal (José García, min. 59), Manu Molina (Amaro, min. 84); y David Torres (Santi Luque, min. 72).
Goles:
1-0, min. 18: Asdrúbal; 1-1, min. 30: Iban Salvador, de penalti; 1-2, min. 55: Calero.
Árbitro:
Fernández Buergo (Asturias). Expulsó por doble amarilla al visitante Calero (min. 85). Amarilla al local Iban Salvador y a los visitantes Chiapas, 'Chatón' Enríquez y José García.
Incidencias:
Partido disputado en Barreiro ante 1.500 espectadores.
