El Concello iniciará trabajos de mejora en accesibilidad e iluminación por valor de 42.000€
Gondomar llevará a cabo un nuevo proyecto de mejora de las instalaciones de la plaza de abastos municipal. Se trata de la tercera intervención realizada en los dos últimos años que cuenta con un presupuesto de 42.000 euros.
Fuentes municipales adelantaron que las mejoras estarán acabadas a finales de 2014. Así pues se procederá a la eliminación de barreras arquitectónicas con el fin de mejorar su accesibilidad mediante la construcción de rampas, la optimización del consumo energético en las zonas comunes con la instalación de iluminación basada en tecnología led, la instalación de rótulos luminosos en los comercios así como al mantenimiento general de limpieza y pintura.
Las obras están cofinanciadas por el Concello y la Consellería de Industria y Comercio de la Xunta de Galicia a razón del 25% y 75%, respectivamente, a través de una subvención de la Administración ya concedida. “A lo largo de este mes procederemos a su adjudicación, contamos con un plazo de ejecución de 30 días con que a principios de diciembre deberían de estar finalizadas”, explicó. Camesella añadió que el tope puesto por la Xunta para justificar la ayuda está marcado el 31 de diciembre, de manera que “tenemos como tope hasta el último día de 2014 para rematar y pagar los trabajos”.
Así pues se trata de la tercera intervención realizada por el Concello en las instalaciones. La primera se realizó en 2012 y consistió en la renovación de toda la fontanería de la plaza de abastos, fueron financiadas con fondos municipales por un valor que rondó los 10.000 euros. La segunda, en 2013, se orientó a la renovación de los accesos principales por valor de 20.000 euros cofinanciadas por la Xunta. La tercera, que comenzará en pocos días, cuenta con un presupuesto de 42.000 euros.
Las tres últimas remodelaciones del inmueble suman un total de 72.000 euros, una cantidad percibida en varias partidas de baja cuantía, pero que según el responsable de área “lo importante es mejorar las instalaciones sin olvidar la esencia de los mercados tradicionales y sobre todo que se lleve un mantenimiento periódico de las mismas sin dejarlas de lado”.
