Opinión

¿Porkenón?

Ahora que la paranoia está al orden del día y mucha gente se lanza a la calle a cazar bichos virtuales que no son de comer, nuestro presidente en funciones se ha armado del valor propio de Pikachu y, aún sin los apoyos suficientes, ha entrado al juego de "Porkenón". Por eso a la pregunta del Rey sobre si está dispuesto a intentar la investidura, ha respondido ¿por qué no? 
Y "porque no" es lo que -de momento- le han contestado todos los líderes de la oposición sin cuyo apoyo o mero laissez faire, laissez passer podría lograr renovar su posición de gobierno. Ninguno está dispuesto a arriesgar en primera instancia, sin ver primero fracasar a Rajoy, que se reserva sin embargo el derecho a renunciar a presentarse desnudo y desvalido ante el Congreso, para no dar la satisfacción a nadie de verle morder el polvo.
¿Por qué no me apoyan de una vez, para deshacer este entuerto?, piensa el líder popular, mientras lo fía todo a la carta de unas terceras elecciones que toda la maquinaria mediática de su partido se encargará de achacar a un PSOE que no está preparado para más desgaste. El mensaje enigmático de Sánchez, resistiéndose a perder su parcela de protagonismo y amagando un nuevo intento de alianza intersideral para un cambio progresista y reformista, suena a un farol que ya nadie piensa que pueda dar luz. 
Ciudadanos está cómodo, presumiendo de congruencia y dejando mover ficha a los demás, atento para que cualquier novedad no le pille con el pie cambiado. Y Podemos y sus confluencias, parecen estar disfrutando de un verano abrasador, que les tiene quemados. Así es que estamos y continuaremos durante semanas entre el ¿por qué no? y el porque no, ni para ti ni para mi, mientras los políticos continúan cazándose como Pokemons, intentando pillarse los unos a los otros. Enrocados sobre sí mismos. Y yo, que estas movidas políticas han acabado de cargarme y las virtuales y electrónicas no me terminan de enganchar, "Nintendo" nada. Y los ciudadanos en general, tampoco. 
Pero para que no digan que la opinión siempre es crítica sin aportaciones, regalo desprendidamente la propuesta de que la primera modificación que se haga de la Constitución Española, recoja el cese definitivo y la inhabilitación vitalicia para la política de los representantes parlamentarios que nos lleven a las urnas por tercera vez consecutiva. ¿Por qué? No me hagan reír. Porque sí. 

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