Opinión

A Vox ¡ni agua!

Detrás de la rotunda postura de Ciudadanos con el veto, trinchera y cordón sanitario que ha establecido ante Vox en el acuerdo de gobierno que estos días se está negociando en Andalucía, puede subyacer una sutil aunque inteligente estrategia de Estado más que respetable.
Las próximas elecciones generales serán las más importantes de la historia de la democracia en España. De momento no sabemos cuándo pueden celebrarse. Si fuera por el doctor Sánchez, 2030 sería pronto. Lo que sí sabemos, es que la demoscopia honesta no otorga mayoría de gobierno a la suma de PP, C´s y Vox, cuestión que supondría que el gobierno actual PSOE, apoyado por Podemos, independentistas y pro etarras, se perpetuarse toda una legislatura, lo que supondría, a mi juicio, el fin del Estado español tal como lo hemos conocido. Probablemente, hoy ya sea tarde y muy difícil, pero seguro que dentro de cinco años esto ya sería un camino de imposible retorno. Nos la jugamos de verdad.
¿Cuál sería entonces la estrategia de C´s? La tesis que comparto es que los naranjas han de distanciarse lo más posible de Vox. ¿Por qué? En primer lugar, porque la bolsa de votos por la derecha está agotado. Los votantes del PP descontentos con Rajoy se han ido primero a C´s y después a Vox. Poco pueden hacer ya por la derecha. Además, aunque Casado haya llegado ya muy tarde, puede recuperar votantes que antes había recogido C´s. ¿Qué le queda entonces, no sólo ha C´s, sino a todos los que creemos que una nueva legislatura de Sánchez sería un desastre descomunal para nuestro modelo de convivencia? Vamos a la segunda parte. A Rivera sólo le queda poner la caña en el caladero del centro izquierda que, por cierto, ha sido siempre la que ha dado y quitado gobiernos en este país. Desmarcarse de Vox en Andalucía puede haber sido el primer gesto para lograr este objetivo.
Pero claro, hay que tener cuidado con lo que se hace. No vaya a ser que la pose estratégica sea tan radical y ofensiva para Vox que éstos provoquen la convocatoria de unas nuevas elecciones en Andalucía. Ojo con las formas, que estos tipos serán de todo, menos cobardes. Si esta es la estrategia y no interesa que sea pública, que lo hablen en privado y jueguen debidamente sus cartas, pero que no empiecen a pegarse como si el que tienen delante no haya de jugar un papel esencial en el peliagudo retorno del buen gobierno. Y de paso, como toda ayuda es poca y nos jugamos tanto, que vayan pensando PP y Vox, por si acaso, en una candidatura única para franquear el hándicap que la perversa ley D'hondt  impone a nuestro sistema electoral.

Te puede interesar