Las opiniones son libres pero los hechos, y además si están respaldados por informes científicos, son sagrados. Los negacionistas del cambio climático llevan tiempo campando a sus anchas y más desde que Donald Trump preside los EE UU y desprecia los acuerdos para combatir el calentamiento global. Esos negacionistas suelen ser también los que se niegan a admitir refugiados en sus países, los que niegan derechos al diferente e incluso los que niegan valor al cine español. El último trimestre del año ha sido el más caluroso desde 1880 cuando comenzaron a medirse las temperaturas según el Instituto Nacional del Océano y la Atmósfera de EEUU y por la NASA, y según la Organización Meteorológica Mundial la temperatura ha subido 1,1 grados desde la era preindustrial. Una subida de dos grados puede ser mortal de necesidad para muchos ecosistemas de la Tierra. Y todos tan frescos.
