Necesita suelo empresarial Vigo? Rotundamente sí, para hoy y para garantizar que las grandes compañías puedan ampliar en el futuro sus instalaciones, como las del sector de la automoción, las aeroespaciales y las conserveras, entre otras que componen los pilares industriales. ¿Hay espacio suficiente para desarrollar algún parque más? La respuesta debe ser también afirmativa en un ayuntamiento que tiene 110 kilómetros cuadrados de superficie, el triple que el término municipal de A Coruña, siendo una ciudad de una población similar. ¿Hay mecanismo para conseguirlo? De nuevo, un sí: Zona Franca, un privilegio del que dispone Vigo, con fondos para desarrollar actuaciones en suelo, que es la base de su actividad como institución. Vigo carece de un instrumento de ordenación adecuado -el Plan de 1993 es un zombi que conviene reenviar al otro mundo cuanto antes- pero cuenta con posibilidades abiertas a través de la"Ley Vigo" y la declaración de proyecto supramunicipal por la Xunta.
El polígono de Matamá se corresponde con otro momento de la historia viguesa, cuando en pleno ciclo alcista de la economía casi todo parecía posible y con buen criterio se articularon planes ambiciosos para cambiar de forma decisiva la cara de la Muy Leal. Entonces se planteó el Plan Guixar, que terminaba con dos torres de más de 20 plantas en una ordenación urgente para un barrio. Y el Plan Beiramar, con el traslado de toda la actividad industrial y frigorífica portuaria desde Jacinto Benavente hasta Matamá. Habría sido lo mejor para todos. Continuará...
PD: El 70 por ciento de losportugueses quieren una unión ibérica. El Eixo Atlántico de la Eurorregión, nacido en Vigo, fue un primer paso.
